Los abogados de Mario Alberto Ávila Lizárraga negaron que el empresario se encuentre prófugo de las autoridades o fuera del país, pese a los señalamientos del Departamento de Justicia de Estados Unidos por supuestos sobornos a funcionarios de Petróleos Mexicanos (Pemex) para obtener contratos.
Los representantes legales de Ávila Lizárraga afirmaron que su cliente no enfrenta algún proceso legal en México por las acusaciones lanzadas por el gobierno de Estados Unidos.
“Está en México, él no está prófugo, él está en México a la vista de todos, no tiene una sola acusación en nuestro país. No está acusado de nada”, aseguró Roberto Keoseyan, uno de los abogados de Ávila Lizárraga, en entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva.
El defensor del empresario comentó que “hace unos meses”, mientras intentaba renovar su visa americana, lo detuvieron para interrogarlo y le quitaron sus dispositivos electrónicos por la investigación en curso sobre supuestos actos de corrupción.
En una oficina del FBI en Houston, Texas, agentes federales estadounidenses le pidieron dar un testimonio y señalar a los presuntos servidores públicos de Pemex que estaban involucrados en actos de corrupción. El empresario rechazó esa petición al no tener conocimiento de lo que mencionaban los oficiales.
“Aparentemente, había una denuncia de alguna mexicana que lo involucraba a él en un acto de corrupción. No tenemos certeza de eso, es una suposición”, agregó el abogado, quien también señaló posibles incongruencias en la acusación del Departamento de Justicia de Estados Unidos al no mencionar los nombres de todos los involucrados en el supuesto acto de corrupción.
Roberto Keoseyan consideró que su cliente no debería enfrentar este proceso, pues es inocente y no cuenta con los recursos para sostener el litigio en Estados Unidos, fuera del orden y después de que se violó el debido proceso.
Además, insistió en que Ávila Lizárraga salió de Pemex en 2012 y, desde entonces, no tiene injerencia ni conocimiento sobre su operación. Fue Felipe Calderón quien lo nombró funcionario y le asignó una subdirección en la región marina de Pemex, donde supervisaba los contratos, aclaró el abogado.
¿Cuál es la acusación del Departamento de Justicia de EU contra Mario Alberto Ávila Lizárraga?
De acuerdo con las autoridades estadounidenses, Ávila Lizárraga y Ramón Alexandro Rovirosa supuestamente conspiraron para pagar al menos 150 mil dólares en sobornos a funcionarios de Pemex y su subsidiaria Pemex Exploración y Producción (PEP).
Según documentos judiciales, entre 2019 y 2021, Rovirosa, Ávila y sus cómplices ofrecieron y pagaron sobornos en forma de artículos de lujo, dinero en efectivo y otros bienes de valor a al menos tres funcionarios de Pemex y PEP, a cambio de que estos tomaran medidas para favorecer a las empresas asociadas con Rovirosa en la obtención y conservación de negocios con la petrolera mexicana.
Esto permitió a esas empresas obtener contratos con Pemex por al menos 2.5 millones de dólares.