La población ocupada en México aumentó en 439 mil 751 en el segundo trimestre del año con respecto al trimestre previo, lo que representó la mayor alza desde el tercer cuarto de 2023, y fue sustentado principalmente en la informalidad.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI, el número de trabajadores en el país se ubicó en 59 millones 441 mil en el segundo trimestre, mientras que el número de desocupados sumó un millón 624 mil, con un aumento de 134 mil con relación al primer trimestre.
En el periodo de referencia, el número de ocupados formales en el periodo disminuyó en 106 mil 598, mientras que los informales aumentaron en 546 mil 349.
Por sector, el de servicios fue el que impulsó el crecimiento de la población ocupada con un incremento trimestral de 212 mil 554 puestos de trabajo.
En su interior, destacó el segmento de comercio, con un aumento de 117 mil 561, junto con el rubro de transportes, comunicaciones, correo y almacenamiento con 39 mil 634.
Por su parte, el sector industrial tuvo un aumento de 32 mil 227 puestos; entre sus rubros destacados, la industria manufacturera observó un aumento 46 mil 763, y en contraparte la construcción registró un descenso de 15 mil 934 empleos. Finalmente, el sector primario tuvo un crecimiento de 156 mil 099.
Por posición en la ocupación, el número de trabajadores subordinados y remunerados reportó una alza de 88 mil 693; el número de empleadores creció en 498 mil 426, mientras que los trabajadores por cuenta propia registraron una disminución de 162 mil 500.
En el periodo de referencia, la Población Económicamente Activa (PEA) aumentó en 573 mil 770 personas, a 61 millones 65 mil.
La Población no Económicamente Activa (PNEA) disminuyó en 218 mil durante el segundo trimestre, con una reducción de 140 mil en la población disponible y de 77 mil 573 en la no disponible.
La tasa de desocupación fue de 2.66 por ciento, ligeramente por encima del trimestre previo en 2.46, cuando alcanzó un nivel mínimo desde 2005.
Favorece economía
De acuerdo con Janneth Quiroz, directora de análisis económico de Monex, la mejora en el avance trimestral del empleo en parte se debe a una menor incertidumbre global para el sector empresarial sobre la política económica de la administración de Trump.
“Entre el primero y segundo trimestre del 2025, vimos una reactivación económica y esto posiblemente es lo que empuja a la mejora del empleo, adicionado a que se ha ido atenuando la incertidumbre sobre las políticas de Trump’’, dijo.
El INEGI informó recientemente que el PIB creció 0.6 por ciento en el segundo trimestre, desde el 0.3 por ciento del primer trimestre.
Quiroz añadió que, si bien aún existen dudas sobre los aranceles, todo indica que las políticas no serán tan agresivas como se había pensado inicialmente, lo que impacta en los indicadores de empleo de manera favorable.
Hacia lo que resta del año, estima que el desempeño del sector laboral será parecido a este segundo trimestre, y si acaso una mejora, pero de manera modesta, ya que aún existen dudas sobre la relación entre México y Estados Unidos, sobre todo de largo plazo.
Preocupa informalidad
La población ocupada informal representó 54.3 por ciento del total, equivalente a 32 millones 589 mil personas, que implicó un incremento anual de 398 mil.
Para analistas de Banamex, es de esperarse que hacia el tercer trimestre esta cifra disminuya debido a la incorporación de más de 2 millones de trabajadores de plataformas digitales al sector formal.
Jesús Rubio, economista e investigador del Colegio de la Frontera Norte, consideró que en los recientes datos de la ENOE destaca el segmento de la informalidad, que está en niveles llamativos.
“Es preocupante que la tasa de informalidad laboral se mantenga en niveles tan altos, pues 55 de cada 100 trabajadores se encuentran en condiciones de informalidad. Lo anterior denota la falta de una política pública eficaz para fomentar el trabajo formal’’, indicó Rubio.
Añadió que este tipo de empleos tienden a ser precarios, sin protección del sistema de salud, prestaciones ni seguridad social.
“El mercado laboral mexicano durante el presente régimen sigue caracterizándose por ofrecer empleos de mala calidad. Tenemos tasas de desempleo relativamente bajas, pero con empleos precarios’’, agregó.