Los recortes de 50 puntos a la tasa del Banco de México son ‘historia’, coincidieron los integrantes de la Junta de Gobierno de acuerdo con las minutas publicadas este jueves 10 de julio.
¿Qué pasará entonces en la reunión del próximo 7 de agosto? El debate estará entre detener los recortes a la tasa o aplicar uno de 25 puntos base, una decisión que dependerá de los datos de la inflación.
El Banco de México bajó su tasa de interés en 50 puntos base a 8 por ciento, una decisión que no tuvo el voto del subgobernador Jonathan Heath. El funcionario argumentó que la trayectoria al alza de la inflación y el deterioro en el balance de riesgos han “agotado el espacio” para más reducciones.
“Con esta decisión se manda un mensaje de complacencia en detrimento de nuestro compromiso con el objetivo inflacionario y nos resta credibilidad, especialmente ahora cuando la trayectoria del pronóstico de inflación no se está cumpliendo. En esta nueva fase de presiones inflacionarias, que no queda claro que sean temporales, es imperativo mandar un mensaje consistente de firmeza”, criticó.
¿Por qué la mayoría de la Junta de Gobierno del Banxico votó por un recorte?
Sin embargo, de acuerdo con las minutas, el resto de los integrantes de la Junta de Gobierno vieron viable el recorte de 50 puntos por tres factores:
- El avance del proceso desinflacionario.
- El debilitamiento de la economía de México.
- El tipo de cambio que favorece al peso mexicano ante un dólar debilitado.
No obstante, un miembro remarcó que sería “el último ajuste de 50 puntos base” y enfatizó que no se tiene una postura predefinida ni una actitud de tolerancia o indiferencia con los niveles actuales de inflación.
¿Qué dicen los economistas sobre las minutas del Banxico?
“En la minuta queda claro que el ciclo de recortes no se ha terminado, pero sí se está desacelerando”, afirmó Andrés Abadía, economista jefe para Latinoamérica de Pantheon Macroeconomics.
“El consenso emergente es que, tras varios recortes de 50 puntos básicos, ahora se requiere un enfoque más prudente, gradual y dependiente de los datos”, agregó.
La inflación en México se desaceleró a 4.32 por ciento en junio, la primera caída en cinco meses, aunque se mantiene por encima del rango objetivo del Banxico, de 3 por ciento, +/- un punto porcentual. La inflación subyacente, que excluye elementos volátiles como alimentos y combustibles, se aceleró.
Sin embargo, algunos funcionarios sugirieron que las perturbaciones que impulsaron la inflación general fueron temporales, lo que justifica nuevas reducciones más pequeñas a la tasa de interés.
“La dinámica de la subyacente no exhibe una aceleración hacia finales de año y principios del siguiente”, según indicó uno de los miembros de la junta.
“Ante el mayor grado de holgura esperado, la moderación del mercado laboral y del crecimiento salarial se continúan anticipando menores presiones inflacionarias”, apuntó.
Con información de Ana Martínez y Bloomberg