Tras ser intervenida por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) por presuntas prácticas de lavado de dinero, Vector Casa de Bolsa informó que opera con normalidad, excepto su negocio de divisas.
A través de un comunicado indicó que la intervención de las autoridades es de carácter gerencial temporal. Sostuvo que la liquidez de la compañía está plenamente garantizada y los servicios siguen disponibles sin interrupción.
“Esta medida prevista en el marco regulatorio aplicable no afecta en modo alguno la continuidad de nuestras operaciones, ni compromete la integridad de los recursos de nuestros clientes. Su objetivo es fortalecer el entorno de certeza institucional, en colaboración estrecha con las autoridades”, manifestó.
Resaltó que “todos y cada uno de los recursos de nuestros clientes están debidamente respaldados por los instrumentos de inversión en los que se encuentran depositados y custodiados con absoluta seguridad por el Indeval”.
Vector Casa de Bolsa aseguró que seguirá colaborando plenamente con las autoridades para esclarecer cualquier inquietud y para reforzar, una vez más, la certeza y transparencia que tienen en el sistema financiero mexicano.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores informó que Vector Casa de Bolsa también tendrá un proceso de intervención gerencial temporal, al igual que CIBanco e Intercam Banco, ante las acusaciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de prácticas de lavado de dinero y vínculos con el crimen organizado.
Aclaró que “la intervención tiene el objetivo de sustituir a sus órganos administrativos y a sus representantes legales con el propósito de salvaguardar los derechos de los inversionistas y clientes de dicha casa de bolsa”, según expuso en un comunicado.
El regulador también señaló que esta acción tiene como base el artículo 141 de la Ley del Mercado de Valores y en respuesta a las implicaciones que en Vector Casa de Bolsa pudieran darse por las medidas anunciadas por Estados Unidos.
En el caso de Vector, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos lo acusa de presuntamente facilitar actividades de lavado de dinero de diversos cárteles con sede en México, los cuales son clasificados como organizaciones terroristas por este país. También presuntamente posibilitó la adquisición de precursores químicos de China con fines ilícitos.
