El presidente Donald Trump enfrenta dificultades para convencer a los consumidores estadounidenses sobre los beneficios de su guerra comercial, según una encuesta de Harris para Bloomberg News.
La mayoría de los adultos en Estados Unidos, un 56 por ciento, considera que sus finanzas familiares estarían en mejor situación si los aranceles de Trump no se hubieran implementado.
Asimismo, un 52 por ciento de los encuestados señaló que los beneficios prometidos por estos gravámenes no justifican su costo económico.
Efecto de los aranceles de Trump en Estados Unidos
Este análisis llega después de que los aranceles de la llamada “Liberation Day” de Trump representaran el mayor acto de proteccionismo en Estados Unidos desde la década de 1930, elevando la carga fiscal sobre las importaciones a su nivel más alto en casi un siglo.
La implementación de estas medidas provocó tumulto en los mercados financieros y renovadas preocupaciones sobre la posibilidad de que Estados Unidos entre en recesión.
La encuesta, que tiene un margen de error de 2.5 puntos porcentuales, se llevó a cabo del 8 al 10 de mayo entre aproximadamente 2 mil 100 adultos estadounidenses.
Esto significa que fue realizada después de que Trump detuviera la aplicación de muchos de los aranceles que anunció a principios de abril, pero antes de que Estados Unidos y China acordaran reducir temporalmente sus respectivos aranceles mientras continúan las negociaciones.
Precios altos que ‘golpean’ el bolsillo de los estadounidenses
A pesar de los vaivenes en las políticas comerciales, empresas como Walmart Inc. han advertido que los precios más altos están por llegar, y los economistas anticipan una desaceleración del crecimiento económico en el país.
Los estadounidenses parecen haber asimilado esas advertencias sobre el aumento de precios, ya que el 69 por ciento de los encuestados espera costos más altos para productos cotidianos como resultado de los aranceles.
El propio Trump ha reconocido esta posibilidad, sugiriendo en una ocasión que los niños podrían tener “dos muñecas en lugar de 30” y que “quizás las dos muñecas cuesten un par de dólares más de lo normal”.
A pesar de ello, el presidente sigue promoviendo agresivamente su agenda comercial como una estrategia para devolver los empleos manufactureros a Estados Unidos.
El 49 por ciento de los consumidores cree que los aranceles tendrán un efecto negativo en la economía, una proporción mayor que el 30 por ciento que piensa que los gravámenes serán beneficiosos para la economía.
Aunque la inflación está muy por debajo de su pico reciente y avanzó a un ritmo más lento de lo esperado en abril, tres de cada cinco encuestados señalaron que el costo de los productos cotidianos ha aumentado en comparación con el mes pasado.
Esto sugiere una percepción generalizada de que los incrementos de precios siguen siendo una realidad frecuente.
‘No veo cómo los aranceles actuales están ayudando a alguien’
Mackenzie Knight, de 35 años, quien trabaja en recursos humanos en una universidad del Área de la Bahía, teme que los aranceles de Trump puedan afectar aún más su ya ajustado presupuesto.
Tras haber enfrentado un periodo de desempleo hace tres años, Knight siente que apenas ahora ha logrado estabilidad financiera. Sin embargo, los altos costos de renta en su región le han dificultado ahorrar.
“No estoy completamente en contra de los aranceles si son un requisito económico que beneficia a ambas partes”, comentó.
“Pero no veo cómo los aranceles actuales están ayudando a alguien. Para muchos estadounidenses, es muy frustrante”.
Knight también está preocupada por la posibilidad de una recesión o, al menos, una desaceleración económica que podría costarle su empleo.
Aunque el mercado de valores se ha recuperado del impacto inicial de los aranceles y el crecimiento del empleo sigue siendo sólido, el sentimiento del consumidor cayó a casi un mínimo histórico, según un informe de mayo.
Además, Jamie Dimon, de JPMorgan Chase & Co., advirtió recientemente sobre los riesgos económicos.
Según una encuesta, la mitad de los estadounidenses cree que la economía ha empeorado desde 2024.
Esta percepción está influenciada en gran medida por factores políticos: el 66 por ciento de los demócratas opina que la economía se ha debilitado desde el último año de Joe Biden en la presidencia, en comparación con solo el 25 por ciento de los republicanos. Más de la mitad de los independientes también cree que la economía ha empeorado.
Ajustando presupuestos
Mientras las negociaciones arancelarias de Trump continúan, algunos consumidores están reduciendo sus gastos en previsión de mayores aumentos de precios que podrían afectar sus finanzas.
Grandes minoristas ya están ajustando sus precios. Walmart informó que los clientes comenzarán a notar aumentos de costos debido a la llegada de nueva mercancía.
“Los aumentos de precios están ocurriendo ahora mismo y serán más evidentes”, dijo John David Rainey, director financiero de Walmart, en una entrevista con Bloomberg News el 15 de mayo.
Target Corp. también ha señalado que está ajustando sus precios debido al entorno volátil.
La empresa, que depende más que Walmart de las ventas de productos discrecionales como ropa y artículos para el hogar, redujo su pronóstico de ventas esta semana tras un marcado descenso en el gasto de los consumidores.
Tres de cada cinco encuestados dijeron que han reducido sus gastos por preocupación ante una posible recesión, mientras que el 16 por ciento afirma que aún no lo ha hecho, pero planea hacerlo pronto.
De quienes han reducido gastos, más del 70 por ciento dice que han dejado de salir a comer y el 57 por ciento reporta gastar menos en entretenimiento.
Aunque alrededor de la mitad de los estadounidenses planea viajar este verano, un tercio de ellos dice que ha reservado menos viajes este año en comparación con el verano pasado.
