Entorno Económico

¿Qué hará la Fed? Sabemos mucho

Derivado de declaraciones y comunicados oficiales, sabemos que la Reserva Federal ya terminó de elevar su tasa de referencia.

Seamos justos. A estas alturas, y por múltiples razones, ningún banco central tendría el margen de maniobra para comprometerse explícitamente, y con significativa antelación, a una fecha y magnitud en que dará inicio a su ciclo de recorte en la tasa de interés de referencia. Lo anterior incluiría a la Reserva Federal, que actualmente atraviesa una coyuntura compleja donde el escenario de ‘aterrizaje suave’ no termina de consolidarse y los riesgos de repunte inflacionario no pueden ser descartados a la luz de los datos recientes. No obstante, considero razonable reconocer que sabemos bastante respecto al plan de vuelo de la Reserva Federal. A continuación, cinco puntos clave.

Primero, derivado de declaraciones y comunicados oficiales, sabemos que la Fed ya ha terminado de elevar su tasa de referencia. Lo anterior no es cualquier cosa; se requiere suficiente convicción para que una autoridad monetaria opte por cancelar un tercio de sus opciones. Más aún, queda claro que su debate actual versa sobre el mejor momento para comenzar a recortar la tasa guía.

En segundo lugar, justo la semana pasada, el presidente de la Fed, Jerome Powell, declaraba que “el Comité no espera que sea apropiado reducir el rango objetivo hasta que haya ganado una mayor confianza de que la inflación se está moviendo de manera sostenible hacia el 2 por ciento”. De esta forma, no solo se refrendó implícitamente un enfoque basado en los datos y sus trayectorias, sino que se fue más allá, lo cual es justo el tercer punto.

Tercero, tenemos impresa otra importante afirmación, aquella que advierte que no se busca algo distinto a lo que hasta ahora han mostrado los datos, sino confirmación de una trayectoria similar. Lo anterior, sin duda, delimita el tipo de comportamiento que se requiere corroborar en los próximos datos de inflación y actividad económica. Si las trayectorias recientes se confirman, podremos estar confiados en que la Reserva Federal comenzará su ciclo de recortes en la tasa. Lo anterior nos lleva a un nuevo punto: ¿cuándo?

Como cuarta escala tenemos la incógnita de cuándo será el mejor momento para iniciar un ciclo de normalización de las condiciones monetarias. Creo que se puede suponer con alta confianza que la Reserva Federal ya tendría una ventana de fechas aproximada, derivada de sus escenarios y proyecciones extraídas de modelos econométricos internos. No obstante, en presencia de alta incertidumbre, se estaría tomando tal ventana teórica con cierta flexibilidad.

No obstante lo anterior, creo que la ventana tiene un rango más o menos claro y estrecho. Tomando en cuenta que, por un lado, la Fed querría evitar la materialización de una recesión y, por el otro, tendría en cuenta el retraso con que actúan sus decisiones de política monetaria pasadas, podríamos tener convicción de que no esperará a que la inflación converja a su objetivo (proyectado para 2025). Es decir, no creo que esté en su interés mantener las tasas altas por mucho más tiempo, arriesgando así transitar de lo que parece ser un escenario de ‘aterrizaje suave’ a uno recesivo.

Así veo mucho sentido en anticipar el primer recorte hacia mediados del año (junio en específico). No obstante, creo que el espacio de maniobra estará condicionado por una autoridad que se permitirá ser flexible, pausar o hasta llevar a cabo un ciclo de recortes por escalas o secciones en los siguientes trimestres.

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