Al interior de Citibanamex se hablaba de forma persistente desde hace más de un año del relevo que habría en la dirección del banco, el cual finalmente se concretó el jueves pasado: Ernesto Torres Cantú asumiría la dirección para América Latina en sustitución de Jane Fraser, la mujer que como dijimos, mandaba en Banamex y con quien logró hacer equipo en estos años.
Por un lado, las más de tres décadas de experiencia de Torres Cantú en la institución vislumbraban un relevo, pero también porque el banco se perfila hacia un área donde las tecnologías serán la base principal de su crecimiento, y es ahí donde también Fraser ha puesto la mira.
De acuerdo con quienes conocen la institución, todo indica que se repetirá una dirección compartida entre dos perfiles opuestos, pero complementarios. Por un lado, Rodrigo Kuri, quien lleva toda la innovación tecnológica y que a decir de parte de su gente, supo identificar las fortalezas que había en su equipo y los promovió, alentó e impulsó, ha generado un amplio reconocimiento en su liderazgo no sólo en su área, sino en todo el banco.
Además, es uno de los que les puedo confirmar que trajo al país e impulsó el Código QR como opción para incluir a más personas al sistema financiero. Estos años fue persistente y promovió la idea con sus compañeros de otros bancos quienes ya unidos, trabajaron primero con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, y luego con Banco de México, que finalmente fue el que desarrolló y tomo la batuta de CoDi, que hoy es una realidad.
El otro perfil es el de Manuel Romo, director de Consumo, un conocido banquero que se formó en la institución, y luego migró a la competencia —Banorte— y regresó este año en sustitución de Edgardo del Rincón, que dicho sea de paso, se jubiló y se integró como director de Banco del Bajío. Él no solo tiene amplia experiencia en consumo, que es uno de los pilares del grupo, sino también se le reconoce su seriedad, lo que podría ser considerado por los mercados financieros que atiende Citibanamex.
Ambos perfiles se pueden complementar y tener una dirección general y una adjunta, como se vino trabajando recientemente —esto si no hay sorpresas y traen un tercero en discordia— pero rompería la tradición de Citibanamex que se distingue por ascender a su talento humano y así lo ha hecho durante años.
Sin duda, el desarrollo futuro de Citibanamex se irá redefiniendo poco a poco en los siguientes meses, ¿en qué banco se transformará? Sin duda, en uno mucho más digital, moderno pero que no vemos esté dispuesto a dejar la operación de mercados en el que tanto éxito han tenido.
Y ya que hablamos de Citibanamex, quizás poco sepan es que se reunieron recientemente sus directivos de seguridad informática con el presidente López Obrador, con quien hablaron sobre los riesgos que habían encontrado en esos temas, mismos que fueron minimizados. El hecho es que invertirán varios millones de dólares en esas áreas y se ofrecieron a intercambiar y dar asesoría también a instituciones de gobierno relacionadas con el sector financiero, ya que los ataques que se reciben en general en el sistema van en aumento.
Y en el otro lado de la moneda, ya que se hablan de cambios en bancos, hace varios meses de que asumió la dirección de Scotiabank México, su nuevo director Adrián Otero ha mantenido más que perfil bajo; dicen que sigue entendiendo al banco de origen canadiense, habrá que ver si pronto pone su sello y sale a comunicar sus planes. Por lo pronto, la moneda está en el aire.