El canciller Juan Ramón de la Fuente y el secretario de Estado, Marco Rubio, sostuvieron una segunda llamada, y ambos gobiernos siguen hablando a medias sobre lo que se discute. Por un lado, el gobierno estadounidense aseveró que México aceptó “la repatriación de migrantes ilegales a sus países de origen”, algo que la SRE dejó fuera. Por su parte, la Cancillería mexicana afirmó que ambos secretarios hablaron sobre el “control de tráfico de armas”, tema en el que México ha sido insistente pero que el Departamento de Estado dejó fuera de su comunicado. O sea cada quien su tema.
Salvedades judiciales
Que quienes salvaron el proceso de elección judicial fueron las ministras Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, pues a pesar de que votaron contra el proyecto de la Corte, que decía que el Tribunal Electoral no podía dejar sin efectos las suspensiones de amparo, votaron a favor de que dichas suspensiones fueran revocadas. Mención especial lo que dijo Yasmín Esquivel en el sentido de que era un absurdo votar como la mayoría porque podría sentar el precedente que un Tribunal Colegiado detuviera una elección de Presidente de la República y que el Tribunal Electoral se quedara mirando, sin cumplir su responsabilidad de velar por las elecciones.
Baja voluntaria de la contienda
La exmagistrada Gabriela Villafuerte anunció ayer, de manera sorpresiva, que renuncia a su candidatura para la elección judicial. Iba a aparecer en la boleta para una de las dos magistraturas vacantes de la Sala Superior del TEPJF, y era de las aspirantes favoritas para ocupar ese cargo, pues tiene amplia experiencia y fue magistrada electoral en los últimos años. Ayer, ante el INE, presentó su dimisión, “por congruencia y convicción”. Dijo que las condiciones en que se hizo el proceso no son acordes a disposiciones constitucionales. Por ello, dijo, sería un despropósito y un acto de “inconsistencia e incongruencia, personal y profesional” continuar en la contienda. Así las cosas.
De nuevo, polémica por exdirectores de Infonavit
Durante la discusión de la ley del Infonavit, el panista Marko Cortés no escatimó en refrescar la memoria a Morena respecto de las acusaciones que en otros tiempos hacía contra Alejandro Murat, cuando fue director del instituto en los tiempos de Peña Nieto, pero como ahora ya está de “este lado, lo convierten en puro”. Sin embargo, no tanto, pues el michoacano destacó que ni lo defienden porque “les da penita”. Ante los señalamientos, el exgobernador de Oaxaca afirmó que “no necesito que nadie me defienda”, e insistió en que a quien deben investigar es a su sucesor en aquel cargo, David Penchyna.
Alternativa bilateral
Canadá y empresarios mexicanos empiezan a acercarse. El embajador Cameron MacKay anunció que tuvo una “excelente reunión con el presidente de Concanaco, Octavio de la Torre, para hablar de lo mucho que podemos hacer para estrechar los lazos comerciales Canadá-México”. En medio del torbellino que llegó a remover toda la relación en América del Norte, es buen plan que, como ya lo hicieron en la negociación del T-MEC, ambos países entiendan que juntos son más fuertes.
A río revuelto…
Hablando de panistas, quien aprovechó que la vivienda está en la agenda política fue el diputado local Diego Garrido, pues afirmó que los morenistas capitalinos “acaban de aprobar” la obligación para que los propietarios de inmuebles con valor de 4.5 millones de pesos para arriba informen al gobierno en qué lo están ocupando. Algo que –aseguró– podría ser un antecedente para que después expropien inmuebles con el pretexto de la vivienda social, como en Venezuela. Aunque dicha reforma es cierta, el trasnochado panista emitió su tuit como si esto fuera una novedad, pues dicha reforma quedó aprobada desde diciembre de 2024.