Colaborador Invitado

Cómo la IA está personalizando el aprendizaje de idiomas

Herramientas como la Inteligencia Artificial nos ayudan cada vez más a romper las brechas de comunicación haciendo posible la existencia de una traducción instantánea, correctores gramaticales sofisticados y plataformas de aprendizaje personalizadas

En la educación de idiomas, la inteligencia artificial no está reemplazando a los maestros: los está haciendo mejores. Y si no sabemos utilizarla, perderemos la oportunidad de ampliar el acceso al aprendizaje de idiomas para millones de estudiantes. Al contrario de visiones cerradas, la capacidad de la tecnología, la IA se presenta como una aliada poderosa en el aula.

Herramientas como la Inteligencia Artificial nos ayudan cada vez más a romper las brechas de comunicación haciendo posible la existencia de una traducción instantánea, correctores gramaticales sofisticados y plataformas de aprendizaje personalizadas que permiten a los educadores enfocarse en lo que realmente importa: la conexión humana.

Lo que es cierto, y he visto a través de 20 años dedicado a la enseñanza del inglés, es que utilizar la tecnología como un aliado, y no como un sustituto, es la base para mantener el interés de los estudiantes y adaptarnos a sus necesidades, esto permite crear experiencias de aprendizaje más dinámicas, personalizadas y relevantes para el contexto actual. Por eso, me parece que la pregunta no es si es necesario invertir tiempo y esfuerzo para desarrollar habilidades en otro idioma, sino cómo podemos aprovechar la tecnología para usarla con propósito pedagógico marcando una diferencia.

En ese sentido, la Inteligencia Artificial ha demostrado ser de gran ayuda. Por ejemplo, cuando un profesor explica la teoría de cierta lección y asigna ejercicios, la tecnología tiene la capacidad de revisar individualmente los errores de cada estudiante, lo que permite optimizar el aprendizaje y ofrecer a cada quién lo que necesita.

Ignorar el potencial de la inteligencia artificial educacional sería un error estratégico, una reciente encuesta realizada por la edtech Turnitin a 700 estudiantes en México reveló que el 85 por ciento de los encuestados se sienten optimistas sobre el impacto que la IA está teniendo en la educación. Este dato no es menor. La percepción optimista de los estudiantes hacia la tecnología, la vuelve una aliada y no una amenaza; es una posibilidad de enriquecer su experiencia educativa.

Para aprovechar al máximo estas herramientas, es necesario atender todavía algunos desafíos, como la formación adecuada de docentes en el uso de inteligencia artificial, así como las consideraciones relacionadas con la equidad en el acceso. Por ello, las instituciones y sus colaboradores necesitan capacitarse constantemente y ver la tecnología como una aliada potencial en el desarrollo de las habilidades lingüísticas.

Desaprovechar esta predisposición positiva sería un error, perdiendo la oportunidad de construir un futuro educativo más adaptado y de expectativas de las nuevas generaciones.

Andrés Moreno

Andrés Moreno

CEO de Open English

COLUMNAS ANTERIORES

La hiperpersonalización del servicio al cliente con IA
Así no es la democracia

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.