Desde San Lázaro

Al ‘alma mater’ no se toca

Además de criticarla, AMLO ha disminuido el presupuesto de la UNAM bajo pretexto de una austeridad mal aplicada.

La denominación literaria para la institución educativa universitaria es alma mater, esa que se porta con orgullo a lo largo de la vida profesional y más tratándose de la UNAM, que además de su excelencia académica al estar reconocida entre las 100 universidades más prestigiadas del mundo, brinda la oportunidad, casi gratuita, de alcanzar un título universitario.

Bueno, pues la UNAM fue ahora una de las ‘víctimas’ de la verborrea presidencial que sin ton ni son, con una intencionalidad de marcar agenda para esconder el desastroso manejo de la administración pública que ha tenido el presidente de México, arremetió contra su alma mater al acusarla de que se ha convertido en defensora de los proyectos neoliberales y que como todas las universidades del país fue sometida por ese pensamiento y lamentó que se haya derechizado.

En respuesta la casa máxima de estudios indicó que en sus aulas e instalaciones se forman ciudadanos íntegros, de pensamiento independiente, sin ideologías impuestas.

Del affaire entre AMLO y la UNAM se puede decir que quien habla mal de su alma mater no solo es un malagradecido sino un resentido social que busca, en este caso, desde la más alta investidura del país, trastocar el orden institucional que prevalece en la universidad.

La UNAM siempre ha sido un botín demasiado apetitoso para aquellos que buscan desde ese espacio alterar el frágil equilibrio que mantiene la gobernabilidad del país, sin embargo, AMLO o no midió sus palabras o quiere moverle el tapete a las actuales autoridades universitarias, nada más que se equivocó porque no se metió solo contra ellas, sino contra toda la comunidad universitaria.

Lanzó un búmeran que ya viene de regreso.

Al presidente no le importó usar de cortina de humo a la UNAM, esa institución educativa que le dio una carrera universitaria prácticamente gratis en la que se tardó 14 años, además de que con más de 14 exámenes extraordinarios en su haber, obtuvo un promedio de 7.8.

Desde su primer semestre el joven tabasqueño reprobó dos materias de tres, Economía y Matemáticas, las cuales las pasó con examen extraordinario y de panzazo.

De este nivel es el personaje que injurió a su alma mater.

AMLO no solo la ha criticado, sino que le ha disminuido el presupuesto a la UNAM así como al IPN, en aras de una austeridad mal aplicada, ya que esos ahorros que se hacen en el recorte de presupuestos, lo derrocha en la refinería de Dos, Bocas, Tren Maya y el aeropuerto de Santa Lucía, además de fondear sus programas de política social-electoral.

Desde el Congreso, no se hizo esperar la respuesta de los diputados de oposición, quienes lo acusaron de violar la autonomía universitaria.

El Grupo Parlamentario del PRI llamó al poder político a respetar a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), institución que ha formado a millones de mexicanas y mexicanos.

La bancada tricolor reconoció que la UNAM es un espacio plural, en donde la ciencia y el saber no deben tener atadura alguna, como elemento esencial de su autonomía, por lo que siempre se manifiesta a favor de la libertad de pensamiento y de la libre expresión de las ideas.

De manera contundente, condenaron los tricolores cualquier tipo de intromisión e insistieron en que no puede haber influencia del poder político sobre la cátedra, el debate de las ideas y los académicos y estudiantes, ya que la lucha por la autonomía es el reflejo del interés de la comunidad por generar conocimiento.

Para el grupo parlamentario del PRI, la UNAM se ha distinguido por tener en su seno una gran corriente de pensamiento, por impulsar la difusión del mismo y por atesorar y custodiar las más diversas formas de comprensión de la naturaleza e identidad mexicana, por lo que “retomamos su bandera para defender su autonomía y la libre discusión de las ideas”.

La existencia de la casa máxima de estudios ha permitido darle movilidad social al ofrecer formación profesional a personas de todos los estratos socio- económicos, particularmente a los sectores sociales más desfavorecidos.

COLUMNAS ANTERIORES

Insuficiente, el Plan México
2030: ‘Andy’, Colosio, Anaya…

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.