Al entrar en la oficina de Mu Sigma, veo complejas fórmulas matemáticas que decoran el techo y las columnas. Desde ya me queda claro que esta empresa hace las cosas de manera diferente.
Me conducen a una gran oficina con una vista panorámica de la ciudad sureña india de Bangalore, un dinámico epicentro de las tecnologías de la información (TI) con una población cercana a los 9 millones. En el interior, me da la bienvenida Dhiraj Rajaram, CEO de Mu Sigma, una empresa que se está expandiendo rápidamente gracias a su habilidad de convertir grandes volúmenes de datos en oro estratégico para sus clientes corporativos.
Rajaram dejó una firma consultora para fundar Mu Sigma en 2004. Estaba convencido de que los 'big data' -los macrodatos o inteligencia de datos- serían pronto una herramienta clave en la toma de decisiones corporativas.
Mu Sigma analiza los datos proporcionados por los clientes en busca de pistas para mejorar sus negocios; los asesora en todo, desde ventas y marketing hasta la gestión de riesgos. Ayudó a que un cliente, un importante minorista, recortara sus costos de distribución en un 30 por ciento al identificar las rutas de transporte más eficientes, en otro caso permitió aumentar las ventas de un fabricante de alimentos en un 2 por ciento mejorando la precisión de las proyecciones de volumen de ventas.
Mu Sigma llama "científicos de decisiones" a su equipo de tres mil 500 expertos en datos. Cada uno ha egresado de la "universidad" de la compañía, donde perfeccionan sus habilidades en el análisis de datos, estadísticas y administración de empresas. Tiene entre sus clientes a más de 140 compañías del Fortune 500, incluyendo Wal-Mart y Microsoft.
Aunque su sede se encuentra en Estados Unidos, más cerca de muchos de sus clientes, el corazón de la compañía late en Bangalore, donde labora la mayoría de sus científicos de decisiones.
Rajaram es todo confianza cuando explica cómo se expandirá su empresa mediante el aprovechamiento pleno y sofisticado de la tecnología de la información. "El mundo está lleno de pequeños problemas, todos interconectados", señala.
Los números dicen mucho acerca de la fortaleza y potencial del sector TI en la India. Según Nasscom, una asociación local de empresas de software, cerca de 3.14 millones de personas trabajan en el sector a nivel nacional y cada año un millón de profesionales en ciencias e ingeniería egresan de universidades indias.
"En 2020, habrá 2 millones de trabajadores de TI tan sólo en Bangalore, superando en número a los de Silicon Valley", afirma un alto funcionario del estado de Karnataka, del cual Bangalore es la capital.
La combinación de los vastos recursos humanos de India y la evolución incesante de la tecnología conduce inevitablemente a la aparición de nuevos servicios. Ejemplo de esta ecuación es Indegene Lifesystems, que se autodescribe como un "proveedor de soluciones clínicas, comerciales y de marketing para las organizaciones globales dedicadas al cuidado de la salud". Entre sus clientes figuran algunas de las principales compañías farmacéuticas del mundo.
Las oficinas de Indegene en Bangalore son un modelo de cooperación interdisciplinaria, con especialistas médicos y farmacéuticos, programadores y diseñadores trabajando en equipo. Se dedican a la creación de materiales digitales que proporcionan información farmacológica en formas fáciles de entender. Actualmente, están desarrollando un sistema para facilitar el diálogo en línea entre los médicos y los empleados de las compañías farmacéuticas. "Creamos innovación a través de la integración médica y TI", dice su CEO Manish Gupta.
Vergel de talentos
Desde la década de 1990, India se ha ido convirtiendo en un proveedor líder de tercerización, desarrollando y operando sistemas para empresas estadounidenses y europeas, robusteciendo sus recursos de TI en el proceso. El mercado de servicios de TI del país ha crecido a alrededor de 120 mil millones de dólares, cambiando con rapidez tanto en tamaño como calidad.
Cuando se habla de India y la subcontratación de servicios, un nombre que surge con frecuencia es Accenture, una multinacional con sede en Dublín que maneja operaciones financieras, compras y otras transacciones a nombre de clientes corporativos. La compañía del Fortune 500 tiene 24 mil empleados trabajando en la India en el ámbito del outsourcing de procesos de negocio (BPO), y Bangalore es un centro neurálgico para ese campo.
Manish Sharma, un director ejecutivo senior de Accenture, dice que la industria del outsourcing de procesos de negocio es muy diferente de lo que era hace cinco años. Quedaron atrás aquellos días en que se subcontrataba a otras empresas para realizar tareas simples. "Las necesidades del cliente son hoy más complejas que nunca, desde la reducción de costos a las reformas organizacionales y el crecimiento de los ingresos", señala.
En Bangalore están las oficinas de potencias como Cisco e Intel, subrayando una tendencia creciente entre las empresas activas a nivel mundial para establecer una presencia física en los mercados en donde operan. Y las compañías tecnológicas no son las únicas que lo hacen; un gran abanico de empresas, desde el sector automotriz al minorista, también se ha sumado a esta tendencia.
Un buen ejemplo es la cadena minorista estadounidense Target. Su sala de conferencias en Bangalore tiene dos relojes, uno muestra la hora local y el segundo la hora en la oficina central de Minneapolis. A pesar de que no tiene ninguna tienda en India, Target concibe su oficina de Bangalore como "una extensión de la oficina central y parte del equipo global", según un funcionario de la compañía.
La unidad india de Target emplea a tres mil personas, cuya principal tarea es analizar grandes volúmenes de datos, como las opiniones de los clientes recogidas de las redes sociales, y desarrollar tecnologías para las ventas en línea y la gestión de la cadena de suministro.
"El negocio minorista se ha convertido en un negocio basado en las TI", resume Navneet Kapoor, presidente de Target India.