CIUDAD DE MÉXICO.- La consejera presidenta del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE), Teresa Bracho, aseguró este lunes que la iniciativa de reforma educativa presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador es una afrenda al artículo tercero de la Constitución.
"Yo me atrevería a decir que fue una iniciativa muy poco cuidada, con un numero enorme de errores de todo tipo; como especialista en educación y trabajadora en educación de toda mi vida, me parece que ofende al artículo tercero", dijo.
En conferencia de prensa para presentar los puntos en contra a la iniciativa que fue enviada a la Cámara de Diputados y que será discutida en el próximo periodo ordinario de sesiones, los consejeros del INEE se pronunciaron por una autonomía al órgano que se encarga de evaluar el aprendizaje en los estudiantes.
Aseguraron que la evaluación se convirtió en un tema de "condena moral y política", y se olvidó que es indispensable para alcanzar la calidad educativa; a partir de ahí, agregaron, se planteó su eliminación, a pesar de que no se encarga de evaluar a los docentes.
"Según la exposición de motivos, la eliminación del INEE es motivada porque se percibió como un instrumento persecutor (sic) del magisterio. Con esto se cancela una institución con 16 años de vida, cuya función no es evaluar docentes", señaló Bracho González.
Al respecto, la consejera Sylvia Schmelkes del Valle refirió que el INEE se encarga de coordinar el Sistema Nacional de Evaluación Educativa (SNEE), es decir, trabaja con cada entidad el programa de evaluación que requiera, pues las entidades se encargan de la educación.
"Curiosamente el presidente de la República ha dicho que el INEE desaparecerá porque evalúa maestros, y bueno curiosamente lo único que no hacemos es evaluar docentes. Sí tenemos el mandato por ley de vigilar que las evaluaciones de docentes se hagan conforme a lineamientos que nosotros debemos emitir y supervisar, pero la evaluación de docentes la hace la Secretaría de Educación Pública, esa es la verdad", afirmó.
En tanto, el consejero Bernardo Naranjo aseguró que el gran problema de la reforma educativa anterior fue la evaluación de permanencia, la que se realizaría cada cuatro años para mantener a un profesor. Sin embargo, existe una "confusión inducida" sobre las evaluaciones pues ahora queda en duda qué pasará con las evaluaciones de ingreso y promoción.
"Todo el problema de la reforma educativa deriva de lo que fue la evaluación de desempeño, que tuvo problemas de claridad, de implementación, ¿por qué entonces hoy en vez de hablar de evaluación de desempeño de si se elimina o corrige, estamos hablando de concurso de ingreso y a la promoción?; es decir, hay una confusión inducida, era muy fácil decir, quitemos de la Constitución la palabra permanencia, pues nuestros irrenunciables son los concursos de ingreso y promoción", añadió.
Recordó que encuestas del instituto, dos de cada tres maestros estaban a favor de la evaluación para el ingreso y el 93 por ciento de los normalistas apoyaban ese tipo de concursos, para terminar con la venta y herencia de plazas.