CIUDAD DE MÉXICO.- Héctor Mauricio González González, identificado como uno de los líderes del grupo de golpeadores Los Claudios, sí participó en la trifulca del pasado viernes en Cuajimalpa, entre seguidores del PRI y PRD, que dejó 17 heridos –entre ellos un joven perredista de 16 años al que le perforaron el pulmón–.
Autoridades de la Procuraduría capitalina confirmaron lo anterior, y precisaron que Héctor Mauricio era uno de los sujetos que encabezó al grupo de priistas que se enfrentó a perredistas por el supuesto retiro de propaganda electoral.
Héctor Mauricio fue funcionario de la Dirección de Protección Civil de la delegación Cuajimalpa, en la administración de Adrián Rubalcava, pero renunció al ser identificado con uno de los líderes de un grupo de choque. Como subdirector de Protección Civil en Cuajimalpa, se le identificó golpeando a cirqueros que se manifestaron frente a las instalaciones de la Asamblea Legislativa del DF, en noviembre de 2014.
Entonces se supo que el citado grupo de choque se le denominaba Los Claudios y que trabajaban al servicio del entonces jefe delegacional en Cuajimalpa, Adrián Ruvalcaba, aunque éste a la fecha niega este hecho.
El nombre de Los Claudios es en alusión a su líder Claudio Germán González, hermano de Héctor Mauricio, quien actualmente está detenido en un penal de máxima seguridad por su participación en –al menos– tres secuestros.
Héctor Mauricio también tiene antecedentes penales y fue detenido el 14 de abril, según consta en la averiguación previa VC-3/T1/1150/15-04, iniciada en la fiscalía de la procuraduría capitalina en la delegación Venustiano Carranza.
Un día después, el 15 fue abril, fue remitido a la Procuraduría General de la República, como presunto responsable de los delitos de portación de arma de fuego y delitos contra la salud, pero este logró conseguir su libertad con el pago de una fianza.
En lo que va del proceso electoral, la dependencia que encabeza Rodolfo Ríos, ha iniciado 11 averiguaciones previas por delitos electorales en la delegación Cuajimalpa, considerada como la demarcación más conflictiva, pues ahí se han iniciado una de cada tres denuncias por delitos electorales en el actual proceso.