CHILPANCINGO.- El obispo de la Diócesis de Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, aseguró que algunas de las mujeres que han sido asesinadas en Guerrero se dedicaban a la prostitución, o eran contratadas como 'halconas' por grupos de narcotraficantes.
El prelado católico reconoció que existe machismo en la sociedad mexicana, situación que se refleja en actos de violencia contra las mujeres, y que algunos terminan en homicidios.
El obispo Rangel Mendoza dijo que "muchas mujeres están involucradas por ejemplo en el narcotráfico, en la prostitución, sirven de halcones y mucha gente de éstas, ahí es donde pierde la vida. Lo que quise decir, que en estos lugares no convenientes están las mujeres, y en son de sarcasmo dije: no precisamente están en misa".
Insistió en que está en contra de los feminicidios, y agregó que no se justifica que sean asesinadas aún cuando estén vinculadas a actividades delincuenciales.
El representante católico dijo a los medios de comunicación que lo abordaron que la vida de cualquier persona debe ser respetada, donde quiera que esté. Y agregó que hay muchas mujeres que laboran en ese tipo de trabajos (prostitución o delincuencia) porque no tienen un pan para ellas y para sus hijos.
Días antes, Salvador Rangel dijo a medios en entrevista que Guerrero se está distinguiendo por la violencia a las mujeres, porque en el fondo subsiste el machismo entre los mexicanos.
"Honestamente lo voy a decir, cuántas mujeres de estas asesinadas, precisamente no andaban en misa ni andaban en la catedral, sino que son mujeres que por la situación económica tienen que buscar el pan de cada día y buscando el pan de cada día para ellas y muchas veces para su familia, encuentran la muerte", había declarado el líder religioso.
Ambas declaraciones le valieron reacciones adversas por parte de grupos de feministas, principalmente, que le exigieron se retracte de sus apreciaciones hechas públicas, mismas que fueron calificadas como misóginas, feminicidas y que revictimizan a las mujeres que han sufrido es tipo de violencia.