Los pueblos indígenas de la Ciudad de México hicieron un reclamo al presidente Andrés Manuel López Obrador, a la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, y al alcalde de Milpa Alta, Octavio Rivero, por el crecimiento desordenado que se ha generado en la capital del país, las invasiones en zonas irregulares, la tala ilegal que se ha tolerado en la demarcación, así como por la falta de reconocimiento y respeto a sus formas de gobierno.
Mientras la jefa de Gobierno destacó la designación de recursos para las comunidades del sur de la ciudad, López Obrador planteó que ya no se autorice la construcción de fraccionamientos o unidades habitacionales en las zonas rurales de la capital del país.
Durante un encuentro que sostuvo el titular del Ejecutivo Federal con pueblos indígenas en Milpa Alta, en la Ciudad de México, Eréndira Vázquez Mota, ex suplente de la representación comunal auxiliar de San Pablo Oztotepec, fue la encargada de plantear las necesidades de los pueblos y barrios de la ciudad, recogidas durante una asamblea el siete de febrero pasado.
Recordó que, aunque la Constitución política de la capital tiene un apartado que reconoce a los pueblos indígenas, "se requiere de la voluntad de todos los ordenes de gobierno para hacer realidad esta norma para poder hacernos cargo de la toma de decisiones de cada barrio y comunidad".
Eréndira Vázquez Mota planteó la instalación de mesas de dialogo con dependencias gubernamentales en las que se discuta la asignación y destino del presupuesto y se acuerden planes de trabajo para darle solución a los problemas como: la representación política de los pueblos, la contaminación en cuencas y humeadles, la generación de planes de manejo de los recursos naturales, la producción sustentable de bienes de consumo como maíz, amaranto y hortalizas, así como la creación e impulso de mercado locales y regionales como centros de acopio.
"De manera particular proponemos que los productos de nuestros pueblos abastezcan los mercados de la ciudad y se dignifique a quienes lo comercializan, es urgente que se regularice de predio y la tenencia de la tierra a partir de procedimientos censales", añadió la vocera de las comunidades.
En su oportunidad, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, destacó la designación de recursos, en particular para la demarcación; apoyos al campo por mil millones de pesos, 120 millones de apoyo al bosque, 52 millones de apoyo al desarrollo rural, además, adelantó la construcción de un centro de acopio del nopal, la creación de centros comunitarios para la enseñanza del Náhuatl, así como una estación de bomberos.
Ante los reclamos de los pobladores, el presidente López Obrador dijo que los pueblos indígenas son parte de la llamada cuarta transformación y reiteró que en las políticas de gobierno se dará preferencia a la gente humilde.
Desde Milpa Alta, esbozó una nueva propuesta, la cual dijo, habló con la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum: "Que de manera clara y tajante, ya no se autorice la construcción de fraccionamientos, unidades habitacionales nada de eso: Sembrar árboles, porque ya lo sabemos, no hay que dejarse vencer por el avance de la mancha urbana".
Esto, añadió, porque "más de la mitad del territorio es rural, y gracias a ese territorio puede tener sustentabilidad en la Ciudad de México, por el bien de la ciudad hay que proteger las áreas naturales".
Dijo que ya se envió al Congreso la iniciativa para elevar a rango constitucional los programas sociales y se comprometió a proteger las áreas naturales de Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco.
Finalmente, prometió la creación de una universidad en la alcaldía para la enseñanza de los pueblos indígenas, la cual impartirá la enseñanza del Náhuatl. "Vamos a crear esta universidad porque necesitamos, eso es fortaleza, es identidad", puntualizó.