Desconcertados y sorprendidos: Así fue como funcionarios de Claudia Sheinbaum recibieron el anuncio de un arancel de 30 por ciento del presidente Donald Trump, esto tras frecuentes visitas a Washington para convencer a sus asesores de que sus esfuerzos para combatir el narcotráfico estaban rindiendo frutos.
Durante meses, los funcionarios de la administración de Trump se han mostrado efusivos sobre la cooperación mexicana en cuestiones relacionadas con la frontera y la seguridad. “Muy receptivos”, elogió el secretario de Estado Marco Rubio. “Un impulso positivo”, lo calificó el secretario del Tesoro, Scott Bessent.
Pero después vino un ‘balde de agua fría’: El sábado 12 de julio, Donald Trump criticó duramente la estrategia de México contra el narcotráfico. “Lo que ha hecho México no es suficiente, aún no ha detenido a los cárteles”, dijo en el documento en el que anunció un arancel de 30 por ciento a partir del 1 de agosto.
La presidenta Claudia Sheinbaum pidió mantener “la cabeza fría”, pero, según personas familiarizadas con las negociaciones, la exasperación se apoderó de los participantes en las negociaciones con EU. Su enfoque cordial pareció de repente haber dado pocos frutos, al menos por ahora.
El Gobierno busca persuadir a Trump de que México y EU son economías complementarias y que está dispuesto a combatir a los cárteles mexicanos de formas sin precedentes, añadieron las personas, quienes pidieron el anonimato para discutir las deliberaciones internas.
¿Estrategia de ‘cabeza fría’ de Sheinbaum dio resultados?
La amenaza de Trump de un arancel de 30 por ciento con excepciones para los productos certificados bajo el T-MEC es poco probable que mueva drásticamente la aguja más allá de la tasa de 25 por ciento ya vigente, según Bloomberg Economics. Casi 83 por ciento de importaciones de EU desde México estuvieron exentas de aranceles en mayo.
Pero la amenaza de un arancel de 30 por ciento de Trump no es mucho mejor que la tarifa de 35 por ciento que anunció para Canadá, que ha adoptado un tono mucho más ‘agresivo’ con Trump, mientras que México eligió una estrategia ‘amable’.
Algunos funcionarios estadounidenses intentaron sugerir que la cooperación podría continuar a pesar de la carta.
El embajador de EU en México, Ronald Johnson, dijo el sábado 12 de julio en Ciudad de México que Sheinbaum y Trump tienen una “relación maravillosa” y que ninguna asociación debería ser más fácil que la que existe entre sus dos países.
“America First no significa America sola. De hecho, estoy aquí en México con los brazos abiertos en señal de amistad y con un mensaje de verdadero respeto por la soberanía de México”, afirmó Ronald Johnson.
Los aranceles específicos por sectores, incluidos los del acero y, próximamente, los del cobre, habían dado a México en las últimas semanas motivos para pedir a los funcionarios de Trump un acuerdo más justo, ya que busca proteger su posición como principal socio comercial de EU en el mundo.
¿México ya no colaborará con EU en combate a los cárteles por arancel de 30 por ciento?
México había protegido parte de su industria exportadora negociando que un arancel sobre los automóviles anunciado anteriormente se limitara a la parte no estadounidense de los vehículos.
“Es probable que las autoridades mexicanas sigan colaborando de forma constructiva con la administración estadounidense en materia de control fronterizo y, en cierta medida, también endureciendo su postura contra los cárteles de la droga y el flujo de fentanilo hacia EU”, escribió Alberto Ramos, director de Economía Latinoamericana de Goldman Sachs Group.
México también cooperó con la extradición de 29 capos del narcotráfico y un aumento de las redadas en las rutas de la droga. Omar García Harfuch, secretario de Seguridad, ha visitado Washington y, en el frente interno, el gobierno ha impulsado una legislación para aumentar las investigaciones de los delitos sin resolver.
Pero las relaciones también se han tensado en las últimas semanas tras el anuncio de EU de cortar las relaciones con CIBanco, Intercam y Vector por su posible implicación en el lavado de dinero de los cárteles de la droga.
Por ahora, México mantiene el rumbo. La Secretaría de Economía destacó que Marcelo Ebrard se encontraba en Washington desde el viernes 11 de julio para negociar con la Casa Blanca; el representante comercial de EU, y el Departamento de Comercio, y que el Gobierno federal defenderá sus intereses.
México trabajará para encontrar “una alternativa que permita proteger empresas y empleos en ambos lados de la frontera”, afirmó la secretaría.