CIUDAD DE MÉXICO. El reconocimiento el jueves de que "todavía no tenemos una estrategia" contra los extremistas del Estado Islámico (IS) en Siria e Irak por parte del presidente norteamericano, Barack Obama, además de constituir un serio error político, redujo las posibilidades de que el Pentágono lance una ofensiva en ambos países al menos a corto plazo, junto a la renuencia de aliados clave como Gran Bretaña para intervenir.
Sin embargo, mientras el canciller John Kerry insiste en la necesidad de forjar una "coalición mundial" para enfrentar a IS, tras aceptar que los ataques aéreos por si sólos no lo derrotarán ––tema que se discutirá en la cumbre de la Alianza Atlántica esta semana en Gales–– una de las opciones que Estados Unidos estudia es armar a la tribu Dulaim, compuesta por más de mil clanes y cinco millones de personas que se extiende entre el centro de Irak y el sureste de Siria, con ramificaciones hasta Jordania y Kuwait, destacó el analista Brian Downing en Asia Times.
Explicó que la situación requiere el despliegue de fuerzas en la frontera siria para impedir que los islamistas retrocedan a sus bastiones y sean liquidados dentro de Irak, lo que EU puede hacer con las unidades de paracaidistas y del Cuerpo de Marines que posee en Italia y el Golfo Pérsico; no obstante, se trata de una apuesta arriesgada tomando en cuenta la oposición a otra guerra, así como las elecciones intermedias de noviembre en la Unión Americana, por lo que sus operaciones terrestres directas se limitarían al rescate de rehenes, inteligencia y ataques de comando al liderazgo y activos de IS. El problema entonces es que en Siria la guerrilla "moderada" del Ejército Sirio Libre, que la OTAN apoya, "es muy incompetente y desorganizada", mientras que se descartó respaldar al gobierno de Damasco.
Recurrir al ejército irakí, continúa, agravaría las tensiones sectarias en su mismo territorio y en Siria, pues está integrado en su mayoría por chiítas; los kurdos, a su vez, carecen de experiencia a la ofensiva y se han limitado a defenderse. Los Dulaim, en cambio, ya colaboraron con EU para erradicar y cooptar a la guerrilla sunita durante la ocupación de Irak, por lo que su participación fue evaluada por Kerry en Bagdad con el nuevo premier Haider el Abadi y emisarios sauditas. El riesgo, advierte Downing, es que el fortalecimiento de los Dulaim, una de las tribus árabes más antiguas, puede alentar sus propias reivindicaciones de autonomía ante Damasco y Bagdad.