BOSTON.- Una mañana de 2015, Emory Ellis, un indigente de Boston, tenía hambre, por lo que fue a un Burger King, pero en lugar de un desayuno, obtuvo un viaje a la comisaría y más de tres meses en prisión después de que fuera acusado de utilizar un billete falso.
Ellis demandó a la cadena de hamburguesas por casi un millón de dólares bajo el argumento de que fue discriminado por su apariencia.
Este caso se suma a otros recientes como el de un Starbucks en Filadelfia, en el que dos hombres fueron arrestados por no ordenar nada.
El abogado de Ellis dijo que el cajero del negocio seguramente no hubiera cuestionado la autenticidad del billete si se lo hubiera entregado un hombre blanco y vestido de traje. E incluso si lo hubiera hecho, el cajero posiblemente se hubiera disculpado y le habría dicho que no podía aceptar ese dinero en vez de llamar a la policía, declaró el abogado Justin Drechsler.
"Alguien como yo habría recibido una disculpa, pero alguien como Emory de alguna manera terminó esposado por intentar pagar su desayuno con dinero auténtico", dijo Drechsler, quien es blanco.
Un portavoz de Burger King Corp. dijo que la compañía no tolera la discriminación "de ningún tipo", pero que no podía comentar detalles del caso. La empresa indicó que la franquicia es responsable de la capacitación de su personal y de atender los asuntos legales de su restaurante.
El franquiciatario, Two Guys Foods, no respondió un mensaje telefónico este miércoles. Tampoco se localizó en los registros públicos un número telefónico del cajero, quien también fue nombrado en la demanda, y se desconoce de momento si éste cuenta con un abogado.
La demanda de Ellis, que fue reportada primero por el servicio digital de noticias Law360, fue presentada esta semana ante la Corte Superior del condado de Suffolk. En la denuncia, Ellis pide una compensación por 950 mil dólares.
Ellis fue arrestado en noviembre de 2015 y acusado de falsificación de un billete. Su arresto activó una violación de su libertad condicional y fue retenido sin derecho a fianza hasta su última audiencia, indicó la demanda.
Salió libre hasta febrero de 2016 cuando la fiscalía desechó el caso de falsificación una vez que el Servicio Secreto comprobó la autenticidad del billete, dijo la demanda.
