El motor izquierdo se desprendió de un carguero de United Parcel Service Inc. momentos antes de que la aeronave se estrellara envuelto en llamas cerca del centro de operaciones en Kentucky, causando la muerte de al menos 12 personas.
El alcalde de Louisville, Craig Greenberg, dijo en una publicación en X que el número de muertos había llegado a doce y que todavía había varias personas desaparecidas.
Anteriormente, el gobernador de Kentucky, Andy Beshear, dijo que el lugar del accidente estaba “pasando de una fase de rescate a una de recuperación. No esperamos encontrar a nadie más con vida en la zona”, dijo a los periodistas.
El McDonnell Douglas MD-11 cargado de combustible y con destino a Honolulu ascendió lo suficiente como para sobrevolar una valla al final de la pista del Aeropuerto Internacional Muhammad Ali de Louisville, pero luego la aeronave se precipitó contra el terreno y los edificios fuera del perímetro de las instalaciones, dijo el funcionario de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte, Todd Inman, en una sesión informativa aparte el miércoles.
Inman afirmó que el motor que se ve en las fotografías sobre la pista de aterrizaje probablemente sea el del lado izquierdo, lo cual coincide con otro video que la NTSB ha revisado donde se observa el desprendimiento del motor del avión. El accidente resultante dejó tras de sí una extensa zona cubierta de escombros, incendios y humo.
La NTSB ha localizado las grabadoras de voz de la cabina y de datos de vuelo de la aeronave, añadió Inman. Estos dispositivos de color naranja brillante, comúnmente conocidos como la caja negra de un avión, proporcionan información crucial sobre los últimos momentos del vuelo y las operaciones del piloto.
El accidente se produce en un momento de interrupciones generalizadas en el transporte aéreo en todo Estados Unidos, causadas por la escasez de controladores de tráfico aéreo desde que comenzó el cierre del gobierno estadounidense el 1 de octubre.
El secretario de Transporte, Sean Duffy, dijo el miércoles que la capacidad aérea estadounidense se reducirá en un 10 por ciento en 40 ubicaciones de alto volumen a partir del viernes para aliviar la presión sobre el sistema de aviación.
El incidente del martes se suma a un año trágico para la aviación mundial. Hace apenas tres semanas, un avión de carga se salió de la pista y cayó al mar en el Aeropuerto Internacional de Hong Kong, causando la muerte de dos miembros del personal de tierra. En junio, 241 personas fallecieron en un vuelo de Air India que se estrelló poco después del despegue, y en enero un helicóptero del Ejército estadounidense colisionó con un avión regional de American Airlines Group Inc. durante la aproximación al Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington.
UPS hizo referencia al incidente en un documento presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) el martes, afirmando que no cree que el suceso afecte materialmente la situación financiera, los resultados de las operaciones ni el flujo de caja de la empresa.
El miércoles, UPS canceló las operaciones de clasificación de paquetes del servicio aéreo de dos días en las instalaciones —su centro de distribución más grande, conocido como Worldport— después de haber suspendido el trabajo inmediatamente después del accidente.
“Nuestras más sinceras condolencias a todos los afectados (por el accidente aéreo)”, expresó UPS en un comunicado el martes, añadiendo que está colaborando con la investigación. En un comunicado difundido el miércoles por la noche, la directora ejecutiva, Carol Tome, afirmó que la empresa está comprometida con la seguridad. UPS no ha confirmado si alguno de sus empleados se encuentra entre los fallecidos.
Boeing Co., que adquirió McDonnell Douglas en 1997, anunció que está ofreciendo asistencia técnica a la NTSB. La compañía afirmó que trabajará incansablemente con las autoridades estatales y locales en las labores de respuesta.
El sitio web de seguimiento de vuelos Flightradar24 mostró que la aeronave de 34 años, designada como vuelo 2976 de UPS, alcanzó velocidades de despegue y ascendió a unos 175 pies (53 metros) antes de desplomarse contra el suelo.
El avión voló de Louisville a San Antonio el 3 de septiembre y no regresó hasta el 18 de octubre, según los datos. El MD-11 había volado casi a diario desde entonces.
La aeronave involucrada en el accidente del martes fue construida originalmente para Thai Airways International a principios de la década de 1990, antes de ser convertida en carguero hace unos 20 años para UPS. El avión estaba propulsado por tres motores General Electric Co. CF6.
Otros accidentes relacionados con operaciones de UPS incluyen el vuelo 6 de UPS en septiembre de 2010, cuando un Boeing 747-400F se estrelló cerca de Dubái después de sufrir un incendio en la carga durante el vuelo, lo que provocó la muerte de ambos miembros de la tripulación.
En agosto de 2013, un Airbus A300-600F de Airbus A300 SE se estrelló antes de la pista en Birmingham, Alabama, causando la muerte del capitán y el primer oficial. Las autoridades citaron la fatiga, el error del piloto y la consiguiente inestabilidad de la aeronave como causas probables del accidente.
