El gobierno de Estados Unidos agradeció a México por haber enviado bomberos que ayudan en las tareas de rescate tras la devastadora inundación que dejó poco más de un centenar de víctimas en Texas.
“Estamos agradecidos con nuestros socios regionales, incluidos nuestros amigos y vecinos en México, quienes generosamente han enviado valientes bomberos y miembros de sus equipos de rescate acuático y de protección civil para apoyar los esfuerzos de búsqueda y rescate en Kerrville, Texas”, dijo en rueda de prensa este martes Tammy Bruce, portavoz del Departamento de Estado.
El número de fallecidos en el centro-sur de Texas alcanza ya 109, informaron este martes las autoridades locales.
El domingo 6 de julio, el presidente estadounidense, Donald Trump, firmó la declaración de emergencia por desastre natural para atender la emergencia.
Algunos sobrevivientes compartieron aterradoras historias de cómo se aferraron a árboles mientras la corriente de agua se llevaba todo lo que estaba a su paso.
¿Qué pasó en Kerr, Texas?
Una tormenta provocó una inundación en la región conocida como Hill Country a las afueras de San Antonio, donde se habían planeado numerosas actividades al aire libre para celebrar el 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos.
La zona más afectada es el condado de Kerr, donde han sido recuperados los cuerpos de 87 personas. De ellos, 56 son adultos y 30 niños, con la edad de una víctima aún por determinar.
El alguacil del condado afirmó que aún permanecen desaparecidas cinco niñas que estaban hospedadas en el campamento cristiano Mystic y una monitora. En el centro fallecieron al menos 27 campistas debido a la subida del cauce del río Guadalupe.
Mexicanas logran sobrevivir a inundaciones y ayudan a niñas a sobrevivir
Entre las decenas de historias que se cuentan de lo ocurrido el viernes 4 de julio se informó sobre dos jóvenes mexicanas que lograron sobrevivir a la inundación y ayudaron a rescatar a 20 niñas que estaban en el campamento Mystic.
Se trata de Silviana Garza y María Paula, de 19 años. Contaron que la intensa lluvia no las dejo dormir y vieron como los rayos iluminaban las cabañas donde se cubrían del agua.
Poco después les avisaron que se iba a evacuar el campamento, pidieron a las niñas que estaban bajo su encargo llevar consigo solo lo indispensable y escribir su nombre en alguna parte visible de su cuerpo.
“Estábamos en las cabañas en la noche con nuestras niñas porque somos coordinadoras de grupo. Estaba fuertísima la lluvia. Nadie podía dormir y pasamos toda la noche en las cabañas”, contó María Paula en entrevista para N+.
Con información de EFE.