El senador republicano Markwayne Mullin afirmó que los bebés nacidos en Estados Unidos de padres migrantes en situación irregular deberían ser deportados junto a éstos.
Kristen Welker, del programa Meet the Press de NBC, preguntó a Mullin qué debería pasar con los bebés ciudadanos estadounidenses si sus padres son deportados.
“Deberían ir con sus padres. ¿Por qué separar a un niño de ellos?”, respondió el senador por Oklahoma.
El cuestionamiento se debe a la decisión de la Corte Suprema que allana el camino para la orden ejecutiva del presidente Donald Trump, la cual busca restringir la ciudadanía por derecho de nacimiento en algunos estados.
El fallo no aborda la legalidad de la orden, que alteraría la práctica de otorgar ciudadanía a toda persona nacida en el país, sin importar el estatus migratorio de sus padres.
La ciudadanía por derecho de nacimiento, garantizada por la 14ª Enmienda desde la posguerra civil, es un tema clave en el debate sobre migración e identidad nacional.
Desde 1898, la ley ha sido interpretada para otorgar ciudadanía a casi todas las personas nacidas en el país, salvo excepciones, como hijos de diplomáticos.
La administración Trump sostiene que los hijos de migrantes en situación irregular no están “sujetos a la jurisdicción”.
Sin embargo, opositores y expertos rechazan la interpretación de Trump sobre que no deberían recibir la ciudadanía.
Casa Blanca niega intenciones de deportar a niños del sistema de acogida de Florida
La Casa Blanca negó que esté enfocándose en deportar a niños dentro del sistema de acogida (‘foster care’) en Florida, como han denunciado medios, organizaciones civiles e, incluso, legisladores del partido Republicano.
“Es atroz acusar a esta Administración de tratar de enfocarse en niños de acogida. Eso no es para nada lo que está pasando en el Departamento de Seguridad Nacional (DHS)”, declaró la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en su conferencia de prensa.
La funcionaria se declaró “horrorizada” por el titular de un artículo del Miami Herald que señala que el “Gobierno de Trump se enfoca en niños y jóvenes migrantes vulnerables de Florida para deportarlos”.
El artículo reporta que la Administración Trump “ha ordenado a los agentes de inmigración que se enfoquen en los menores no acompañados, ha tomado medidas para reducir los contratos que financian su representación legal y ha enviado agentes de Seguridad Nacional a los hogares donde se libera a los menores no acompañados para realizar verificaciones de bienestar”.
Leavitt replicó las declaraciones del DHS, que en su cuenta de X tachó esta información de “falsa”, al acusar a la Administración anterior, la de Joe Biden, de “perder a cerca de 300 mil niños no acompañados, muchos de ellos inocentes que fueron traficados y explotados”.
“Queremos proteger a los niños, no como la Administración previa, que permitió que traficaran, violaran y, en algunos casos, mataran a los niños por sus políticas de fronteras abiertas. Desafortunadamente, el Miami Herald completamente se degradó con este reporte”, manifestó ahora la vocera de la Casa Blanca.