El senador demócrata Ron Wyden dijo el martes que forzará una votación sobre la derogación de los amplios aranceles globales que Donald Trump anunció la semana pasada, poniendo a prueba el apoyo político a la guerra comercial del presidente.
La estrategia del demócrata requerirá que sus colegas republicanos se pronuncien públicamente sobre la ofensiva arancelaria que ha sacudido los mercados financieros durante días y generado temores de una recesión. Los senadores republicanos muestran signos de inquietud, divididos entre la lealtad al presidente y la ansiedad por posibles daños económicos.
No quedó claro de inmediato cuándo votaría el Senado sobre la resolución de Wyden, la cual, según indicó, contaba con cierto apoyo republicano. Anunció que presentaría la medida durante una audiencia del Comité de Finanzas del Senado con el Representante Comercial de EU, Jamieson Greer.
“Hoy propongo una nueva resolución privilegiada bipartidista para poner fin a los últimos aranceles globales que están perjudicando duramente a las familias y pequeñas empresas estadounidenses”, declaró Wyden. El Senado debe votar sobre las resoluciones privilegiadas.
Una medida similar para eliminar los aranceles de Trump a Canadá fue aprobada en el Senado después de que cuatro republicanos se unieran a todos los demócratas para votar a favor. Esta resolución enfrenta un obstáculo de procedimiento en la Cámara de Representantes y podría ser vetada por el presidente. Sin embargo, esta ruptura pública con el presidente envía una poderosa señal política.
La resolución de Wyden probablemente también enfrentaría un veto presidencial y la oposición de los líderes republicanos de la Cámara.
La resolución del demócrata se suma a varias otras destinadas a limitar el poder arancelario del presidente. Entre ellas se encuentra un proyecto de ley bipartidista copatrocinado por el senador republicano Chuck Grassley de Iowa y otros seis republicanos, que exigiría al Congreso revisar y aprobar la mayoría de los aranceles en un plazo de 60 días. La Casa Blanca anunció que el presidente vetaría la medida de Grassley si se aprueba.