Mediante el uso de malas prácticas financieras empleados y ejecutivos de Consubanco y Opcipres, empresas financieras de la familia Chedraui, defraudan a pensionados del IMSS a quienes tienen acceso mediante bases de datos que obtienen de forma ilegal e infringiendo el tiempo y la privacidad de los afectados en Nuevo León, revela una investigación de El Financiero.
En la mayoría de los casos, los promotores de las empresas de los Chedraui, en forma insistente llaman a los celulares y teléfonos de los afectados señalando que: “por ser pensionado del IMSS tienen acceso a líneas de créditos con tasas de interés y condiciones preferenciales en donde en forma rápida ofrecen los préstamos que serán descontados hasta en plazo de 5 años”.
En el caso más reciente ocurrido en Monterrey el 24 de febrero pasado, un jubilado del IMSS fue acosado en forma insistente por los promotores hasta que le ofrecieron un crédito con las siguientes opciones 100 mil pesos a 60 meses con un pago por mes de 2 mil 270.89 pesos; otra opción de 150 mil pesos, también a 60 meses, pero con un pago mensual de 3 mil 998.67 pesos y una tercera alternativa de 400 mil pesos, a 60 meses, con un pago cada 30 días de 10 mil 430.45 pesos.
El primer descuento iniciaría a fines de abril o inicios de mayo, y lo único que se requería era el INE por ambos lados y firmar un contrato para recibir el crédito, el pensionado interesado solicitó el crédito de 400 mil pesos a 60 meses, con un descuento mensual de 10 mil 430.45 pesos, buscando tener más certeza también pidió asistir a la firma del contrato en las oficinas de Monterrey, situadas en las calles de Pino Suárez 400 Local 6, CP: 64000, en el centro de la ciudad, sin esperar que eso sería el inicio de su problemática.
Al paso de los días, mediante malas prácticas financieras, los funcionarios Eduardo Ceniceros y Pablo López de Monterrey en contubernio con Uriel Anguiano y Miguel Ángel Rodríguez de la Ciudad de México hicieron un pagaré apócrifo, con firmas falsas copiadas digitalmente del contrato del cliente, con condiciones diferentes a las pactadas del préstamo de 400 mil pesos, si bien a plazo de 60 meses, pero ahora con pagos cada mes de 14 mil 394.25 pesos a una tasa de interés de 30.84 por ciento anual.
Este documento nunca fue firmado por el cliente, y en base a éste descontaron de su pensión dos veces, el 1 de abril y 1 de mayo de este año, los 14 mil 394.25 pesos, aún y cuando el afectado devolvió en unos 10 días, durante abril la totalidad del crédito por un monto de 400 mil 690.86 pesos en acuerdo y bajo proceso autorizado por Consubanco.
Cabe destacar que Consubanco y Opcipres están vinculados con la familia Chedraui a través de Grupo Consupago, una entidad financiera que ha estado bajo el control de la familia Chedraui mediante Cubo Capital. En 2019, la familia Chedraui incrementó su participación en Grupo Consupago hasta 98.79 por ciento. Opcipres, por su parte, fue fundada por Alfredo Mauricio Flores Ibarrola, quien también fue director ejecutivo de Grupo Consupago.
En este caso, el cliente afectado acudió con la Condusef y por solicitud de la misma levantó su denuncia ante el Centro Orientación Denuncia (CODE) de la Fiscalía de Justicia de Nuevo León, debido al delito de falsificación de documentos, en este caso el pagaré apócrifo y el cobro indebido de dinero, buscando en este caso que la empresa respete el crédito ofrecido y pactado originalmente, sancionar a los responsables del ilícito y devolver el dinero cobrado por Consubanco.
En los últimos meses, diversos pensionados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han reportado fraudes relacionados con entidades financieras, en donde destaca Consubanco y Opcipres, ambas instituciones propiedad de la familia Chedraui.
“Estas instituciones han sido señaladas por prácticas abusivas que afectan a los adultos mayores, quienes muchas veces desconocen los riesgos asociados a ciertos productos financieros. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) ha emitido alertas sobre estos casos, instando a los pensionados a tomar precauciones”, señalo un funcionario de Condusef.
Indicó que los fraudes reportados siguen distintos patrones, entre ellos: cargos indebidos, en donde los pensionados han detectado descuentos no autorizados en sus cuentas bancarias, algunos meses después de recibir un crédito, afectando sus ingresos mensuales; préstamos no solicitados, aquí los adultos mayores han descubierto que tienen créditos activos a su nombre sin haberlos solicitado, lo que genera deudas inesperadas y engaños en trámites de pensión, en donde se han identificado casos en los que intermediarios fraudulentos ofrecen “gestionar” aumentos en las pensiones a cambio de un pago, utilizando información confidencial de los beneficiarios.
El impacto de estos fraudes es significativo, ya que los adultos mayores dependen de sus pensiones para cubrir gastos esenciales como alimentación, salud y vivienda. La falta de conocimiento sobre los productos financieros y la confianza en instituciones aparentemente legítimas los hace vulnerables a estos engaños.