Monterrey

Jesús Serrano: La Transformación de los Líderes como estrategia de retención de talento

Actualmente, en el norte del país nos seguimos posicionando como un epicentro de inversión y expansión de empleos.

El comienzo de un nuevo año, siempre nos invita a replantear los objetivos que nos hemos trazado para lograr nuestras metas, a nivel personal y profesional.

Actualmente, en el norte del país nos seguimos posicionando como un epicentro de inversión y expansión de empleos, siendo la retención de talento un pilar esencial para afrontar los retos de un mercado globalizado y en constante cambio.

Al encontrarnos en medio de una transición generacional, donde convivimos 3 generaciones diferentes en la fuerza laboral, es importante reflexionar sobre la necesidad de transformar los estilos de liderazgo dentro de nuestras organizaciones impulsados por la digitalización, innovación, sostenibilidad, inclusión y competencias emocionales que nos permitan adaptarnos al desafío de desarrollar y retener talento en nuestros equipos de trabajo.

El liderazgo digital se ha convertido en una necesidad imperante para las organizaciones. Según un estudio de Deloitte (2024), las empresas del norte de México han incrementado un 40% sus inversiones en herramientas digitales para optimizar procesos y mejorar la experiencia del cliente.

Los líderes están adoptando plataformas de análisis de datos, inteligencia artificial y gestión remota para tomar decisiones más rápidas y basadas en evidencia. Esta tendencia requiere que los líderes no solo sean expertos en su industria, sino que también tengan competencias tecnológicas sólidas.

Otra tendencia clave es la construcción de culturas organizacionales que promuevan la innovación. Líderes visionarios están fomentando espacios donde los colaboradores pueden experimentar, cometer errores y aprender. Según McKinsey (2024), las empresas que promueven la creatividad tienen un 25% más de probabilidades de superar a sus competidores en términos de rentabilidad.

En esta región, sectores como manufactura, tecnología y comercio han comenzado a implementar metodologías ágiles y estrategias de design thinking para mantenerse competitivos.

La sostenibilidad ha dejado de ser una opción para convertirse en una prioridad estratégica. Muchas organizaciones están tomando medidas para reducir el impacto ambiental de sus operaciones, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.

Un ejemplo es la adopción de prácticas como el uso de energías renovables y la reducción de residuos industriales. Este enfoque sostenible no solo refuerza la reputación corporativa, sino que también atrae talento joven comprometido con causas ambientales.

El entorno laboral diverso e inclusivo está ganando protagonismo en las organizaciones. Los líderes han comprendido que la diversidad genera innovación y mejora el desempeño empresarial.

De acuerdo con un informe de PwC (2023), las empresas que adoptan prácticas inclusivas tienen un 30% más de probabilidades de captar y retener talento de alta calidad. En la región, esto se traduce en iniciativas que promueven la igualdad de género, la inclusión de personas con discapacidad y la integración de equipos multiculturales.

La transformación de los líderes también incluye el desarrollo de competencias emocionales.

En un entorno laboral post pandemia, habilidades como la empatía, la comunicación asertiva y la gestión del estrés son fundamentales para mantener equipos cohesionados y productivos. Según Gallup (2024), los empleados dirigidos por líderes emocionalmente inteligentes reportan niveles más altos de satisfacción y compromiso.

Una tendencia en las empresas es invertir en programas de formación y coaching para fortalecer estas competencias en sus líderes con acompañamiento psicológico.

Por último, redireccionar a nuestros líderes a utilizar un enfoque adaptativo ante la incertidumbre económica y los cambios regulatorios, se convierte en una necesidad. Esto implica la capacidad de ajustar estrategias rápidamente, gestionar riesgos y liderar con agilidad.

Un ejemplo reciente es la rápida adopción de políticas laborales híbridas, que han permitido a las empresas adaptarse a las demandas de flexibilidad de los trabajadores.

Este es un buen momento para considerar que aquello que “siempre ha funcionado”, quizá ya no es la mejor opción. Afrontar el desafío de ser un líder en cualquier organización hoy, implica tener la apertura de encontrar soluciones para las diferentes demandas y oportunidades que piden nuestros colaboradores, este será uno de los factores clave para que sigamos siendo elegidos como una empresa en la que deseen permanecer.

El autos es Director del Comité de Capital Humano de Index Nuevo León.

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