Mis Finanzas

Los créditos fáciles traen problemas complejos

Como cualquier producto milagro, un servicio otorgado sin garantías ni requisitos, no augura un resultado favorable. Además, la falta de regulación en torno a este tipo de bienes y servicios deja al usuario sin protección ante cualquier fraude o engaño por parte de los oferentes.

CIUDAD DE MÉXICO.- Adquirir un crédito fácil parece una oportunidad sencilla de aumentar los ingresos; pero, también representa una forma simple de ser sujetos de fraude.

Ofertando créditos desde 5 mil hasta 5 millones de pesos, empresas ofrecen supuestas facilidades como no verificar el Buró de Crédito, dar tasas menores a las bancarias, no pedir aval y en algunos casos tampoco exigir comprobantes de ingreso.

De acuerdo con la Organización Nacional de la Defensa del Deudor, de 2013 a la fecha se tiene registro de más de 200 casos de personas defraudadas por empresas que no tienen registro ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). "Funcionan como gestores o intermediarios para tramitar las solicitudes de crédito, trabajan al margen de la Ley; no operan ilegalmente, pero el problema principal es que los clientes no leen los contratos", explicó Ángel González, director de la organización.


Por su parte, Jorge Torres Góngora, director de Educación Financiera de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), explicó que este tipo de empresas "ofrecen un servicio financiero y le cobran a las personas por éste de manera anticipada; es decir, que en lugar de cobrar una comisión una vez que se ha logrado gestionar el crédito, le están cobrando a las personas una cantidad importante previo a otorgarles el crédito. Esto se puede prestar a fraudes porque no sabemos si realmente se está gestionando el crédito o no".

Las empresas Desarrollo Financiero, Cofinancia, Ideas y Soluciones y Bision Administradores son algunos de los ejemplos de entidades que se dedican a proporcionar estos créditos.

Éstas últimas cuentan con más de 536 registros de quejas por fraudes, según el último dato proporcionado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

"La mayoría de las personas que se acerca a este tipo de empresas es porque ya tiene un nivel de endeudamiento muy elevado, nadie les presta y ven los anuncios que presumen requisitos como el no pedir aval, ofrecer intereses bajos, sin checar Buró de Crédito y con pagos muy pequeños, por lo que la gente lo ve como una opción", indicó González.

CÓMO OPERA EL FRAUDE

Estas empresas solicitan al interesado datos personales para determinar con qué institución se puede obtener un crédito y una comisión "por apertura", según el monto que se pretenda conseguir; pero no ofrecen ninguna garantía de que el crédito será efectivamente concedido. Normalmente, se pide que se hagan pagos iniciales por concepto de seguros, honorarios o apertura.

"El cliente puede retirarse en muchas ocasiones sin copia del contrato, donde se especifica claramente que son gestores e intermediarios y que se reservan el derecho de otorgamiento", explicó González.

Claudia cayó en las redes de una de estas empresas. Debido a su nivel de endeudamiento se le ofreció un supuesto crédito de un millón de pesos, pero primero realizó un depósito de 35 mil pesos por gastos de apertura, seguros y por el trámite de gestión.

"No me dieron mi crédito, hice pagos y no cumplieron, cancelé y desde hace tres meses quedaron en devolverme el dinero, pero no ha sucedido nada y ya no he tenido respuesta", expuso en consulta.
En torno a ello, Torres pidió a los usuarios que no se dejen engañar por la aparente rapidez para el otorgamiento de un crédito.

"Si alguien le dice que le puede conseguir un buen crédito rápido y sin muchos requisitos, lo más probable es que se trate de una mentira y que se arriesgue a que al final abusen de usted y se queden con su dinero sin recibir nada a cambio", agregó.

TIPS

1. Si no acudes a una institución bancaria, verifica que la empresa cuente con registro ante la CNBV. De no ser así, toma en cuenta que no estarás haciendo un trámite con una institución financiera.

2. Si optas por usar un servicio de gestión de créditos. Verifica que esté debidamente autorizada por la Profeco y pide referencias.

3. Antes de firmar, pide copia del contrato para leerlo con calma. En caso de dudas, acude a la Profeco o a la Condusef para recibir asesoría.

4. Evita entregar copia de su identificación personal o de tarjetas bancarias.

5. No dés dinero por adelantado. En especial, si no has leído ni firmado el contrato.

También lee: