A pesar de los recortes en los estimados de crecimiento económico mundial para este año y la debilidad de algunas economías como Argentina y Turquía, la gestora de bonos más grande del mundo, Pimco, recomendó mantener inversiones en países con sólidos fundamentales como México.
Esta recomendación se suma a la realizada este miércoles por Morgan Stanley hacia los bonos de Pemex con vencimiento a 2028.
Raji Manasseh, estratega de capitales en Pimco, destacó que el año pasado las bolsas de mercados emergentes fueron las más volátiles a nivel global, arrastradas por temores de un menor crecimiento mundial y crisis financieras en algunos países como Argentina y Turquía, sin embargo recomiendan mantener la confianza en mercados con buenos fundamentos y valoraciones.
"Los fundamentos no justifican el miedo. Creemos que el riesgo de una crisis de financiamiento de base amplia en los mercados emergentes, especialmente el tipo que afecta a los mercados de acciones, es bajo", dijo.
El especialista aseguró que a pesar de que la economía global se está desacelerando, sigue siendo en muchos aspectos más estable de lo que lo ha sido en décadas, pues la pobreza ha disminuido, la inflación ha tendido a la baja y las crisis bancarias, monetarias o de deuda soberana han sido menos frecuentes.
Desde su evaluación, los mercados emergentes que tienen los mejores fundamentos son China, Corea del Sur, Taiwán, India y Rusia, que representan casi el 70 por ciento del índice MSCI EM. Todos tienen bajos índices de deuda externa a PIB, amplias reservas de divisas y superávit de cuenta corriente.
Manasseh destacó que otro 17 por ciento del mercado está formado por Brasil, México y Sudáfrica, países con déficits en cuenta corriente, pero bajos índices de deuda y amplias reservas de divisas.
"Creemos que los mercados accionarios de estos mercados emergentes no corren el riesgo de una crisis financiera", indicó.
Gabriela Santos, estratega de mercado global de JP Morgan Asset Management, destacó en una nota a inversionistas que en el corto plazo, el rendimiento de la renta variable de los mercados emergentes puede variar enormemente, pero a largo plazo la historia es distinta.
"A más largo plazo, estas olas terminan desvaneciéndose de la vista y el destino es impulsado por elementos fundamentales, no por sentimientos", indicó.
La experta explicó que al observar el rendimiento anualizado de las acciones de los mercados emergentes en los últimos 15 años, los múltiplos y las monedas tuvieron una contribución insignificante al rendimiento en este periodo. En cambio, la mayor parte de los rendimientos provino de dividendos y ganancias, los fundamentos.
"Pensando en los próximos 15 años, las acciones de los mercados emergentes deberían continuar proporcionando rendimientos más altos que los de Estados Unidos, impulsados por una demografía más favorable y un crecimiento de ingresos mucho mayor", agregó.
Sin embargo, Santos señaló que para que los inversionistas vean estos retornos reflejados en sus propias manos y no solo en la pantalla de datos, será crucial resistir la tentación de "saltar dentro y fuera del barco cuando las olas se estrellan".