En agosto de 2017 se comercializaron en México 125 mil 331 autos nuevos, 6.5 por ciento menos que en igual mes de 2016, revelan datos de la AMDA.
Se trata de la tercera caída mensual consecutiva en lo que del año y la primera para un octavo mes desde la crisis de 2009.
Expertos del sector explicaron que la contracción en las ventas obedeció al encarecimiento de los automóviles y de los créditos que se otorgan por parte de los diferentes participantes.
"El efecto negativo duró más de lo esperado, porque la situación de cautela de los clientes está afectando al mercado. Yo lo veo por el aumento en precios, que fue más alto de lo previsto", dijo Brais Álvarez, analista de la consultora J.D. Power.
Según información del Inegi, al primer semestre de 2017 el precio de los autos subió 8.37 por ciento en promedio anual, mientras que la inflación general anual fue de 6.31 por ciento.
Guillermo Rosales, director general adjunto de la AMDA, explicó que las condiciones del crédito fueron menos accesibles, incluida el alza en tasas.
"Observamos lo que enfrentamos en junio, que es la desaceleración vinculada con mayores dificultades para sostener el gran nivel de las ventas, hay clientes que no pueden cumplir con las nuevas condiciones de financiamiento", destacó.
En el periodo de enero a agosto de 2017, se vendieron en el país 990 mil 492 autos, apenas 0.3 por ciento más que en el mismo lapso del año pasado.
"A pesar de los datos negativos de agosto, vemos un aumento en las cifras acumuladas, lo cual es una señal positiva de que el mercado puede cerrar (el 2017) en cifras similares al 2016", indicó Brais Álvarez.