Para que trabajadores sin seguridad social puedan adquirir un inmueble, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) de la Ciudad de México propuso crear un Fideicomiso de inversión en bienes raíces (Fibra) para desarrollo de vivienda social que llamarían Fibravit.
Armando Díaz Infante, presidente de la CMIC-CDMX, explicó que Fibravit operaría con un sistema de alquiler de vivienda con opción a compra, ya que al acumular 300 rentas en 25 años, los inquilinos tendrán derecho a ser dueños de dicho inmueble.
Destacó que en el país hay 30 millones de personas que trabajan en la informalidad y por ello no tienen oportunidad de acceder a un crédito hipotecario, sin embargo, cuentan con capacidad de pago o son semiafiliados, es decir pagan ellos mismos su cotización a Infonavit o Fovissste, por ello la necesidad de crear la Fibravit, refirió Díaz Infante.
Señaló que para edificar vivienda social en renta con derecho a compra, el gobierno debe otorgar la redensificación espacial para estos programas, a fin de que la incidencia del costo del suelo sea viable para precio topado de entre 800 mil y un millón de pesos.
También se crearía una mutual, que es una entidad sin ánimo de lucro constituida bajo los principios de la solidaridad y la ayuda mutua en la que personas se unen voluntariamente para tener acceso a servicios basados en la confianza y la reciprocidad.
"La mutual se crearía para que haga la emisión de los certificados de renta y lleve el control de pago de rentas, a fin de que sea un sistema de puntos y con ello saber si se tiene o no derecho a la vivienda", dijo.
Díaz Infante señaló que las rentas de los inquilinos irían a la Fibra y los inversionistas podrían ser la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), a la cual le presentarán el proyecto, o la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi).
Agregó que los inmuebles en alquiler estarían administrados por una institución de vivienda en renta especializada.
El presidente de la CMIC CDMX refirió que este mecanismo estaría diseñado para trabajadores que pagarían mensualidades de alrededor de 5 mil pesos mensuales por el arrendamiento, con los cuales se pactaría un aumento escalonamiento anual de renta de 4 por ciento fijo.
"En 13 años, los inversionistas originales recuperan la inversión más un rendimiento, de tal manera que el programa se vuelva autosustentable financieramente y no son subsidios a fondo perdido", aseguró.
Díaz Infante dijo que mediante este mecanismo una persona en 25 años sería propietaria del inmueble con el pago de la renta y destacó que la tendencia de vivienda en alquiler continuará a la alza, pues actualmente es de 16 por ciento, pero en los siguientes 20 años alcanzará el 35 por ciento.