CIUDAD DE MÉXICO.- El origen estructural del desplome de los petroprecios se relaciona con el aumento de la oferta, sobre todo de Estados Unidos, que en septiembre produjo 8.9 millones de barriles diarios, su mayor cifra desde abril de 1986, según la agencia de energía de ese país. No obstante, las últimas cifras muestran una reducción en la actividad petrolera, que ha sido desalentada por los bajos precios.
La negativa de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a ajustar y respetar sus cuotas de producción, ha contribuido también a la extraordinaria caída en las cotizaciones.
Esto ocurre en un contexto de menor ritmo de la demanda respecto de la esperada y reducciones en el crecimiento mundial estimado para 2015.
Analistas coinciden en que la sobreoferta requerirá ajustarse para observar un repunte de precios, pues descartan que la demanda lo haga en el corto plazo; además de que no ven claro cómo podría lograrse.