CIUDAD DE MÉXICO.- La corrupción en los procesos de adquisición de obras y la falta de financiamiento, siguen erigiéndose como los principales factores que dañan las expectativas de crecimiento e inversión en la industria de la construcción, advirtió César Ortega de la Roquette.
El presidente de la firma Bimsa Reports, también dijo que entre los integrantes del gremio está presente la incertidumbre, porque sus expectativas hacia el tercer trimestre de 2015 es que realizarán menos obras.
Al presentar el Índice de Confianza del Constructor (ICOCO) correspondiente al segundo trimestre del año, señaló que en ese periodo, la confianza de los empresarios del sector cayó hasta ubicarse en 49 puntos, el más bajo desde 2011, cuando en el segundo cuarto del 2014 se ubicó en 50.5 unidades.
Explicó que antes de que inicien una obra, dos de cada tres obstáculos que enfrentan los constructores se relación con trabas burocráticas, mismas que incentivan las prácticas de corrupción.
Anotó que uno de cada cinco de los constructores encuestados señaló que ha sido sujeto de exigencias económicas o pagos en especie no reglamentados por parte de las autoridades, esto para la obtención de permisos de construcción.
Precisó que el 22 por ciento de las empresas consultadas manifestó haber sido extorsionada, índice que creció en 4 puntos porcentuales en los últimos doce meses y la principal característica de este grupo que ha tenido que dar "una mordida", es que son pequeñas y medianas empresas.
Anotó que entre quienes han tenido que pagar una "mordida" para obtener un permiso, sólo uno de cada cuatro piensa que con el nuevo Sistema Anticorrupción se eliminarán los pagos indebidos en estos trámites.
Ortega subrayó que el tema de la corrupción es algo con lo que han convivido las empresas, por lo que "miran con escepticismo los beneficios que puede generar el nuevo Sistema, sobre todo porque aún falta integrar toda la estructura que lo reglamente".
Para la realización del ICOCO se hicieron 300 entrevistas a nivel nacional, entre micro, pequeñas, medianas y grandes empresas y la muestra tiene un error absoluto no mayor a 5.7 por ciento.
Ortega de la Roquette comentó que una de las preguntas a los empresarios fue que si a partir de los resultados electorales de las recientes elecciones, piensan que en donde gobernarán candidatos independientes habrá más transparencia en la asignación de contratos de obra pública, donde el 49.7 por ciento señaló que sí; en tanto un 45.3 por ciento expuso que la transparencia será la misma que la observada hasta hoy y un 5 por ciento asegura que habrá menos transparencia.
En cuanto a lo que esperan los constructores en las entidades donde hubo alternancia entre partidos políticos, el 29.3 por ciento aseguró que habrá más transparencia en la asignación de los contratos; el 59.7 por ciento opinó que será la misma a la observada hoy y el 11 por ciento dijo que habrá menos.
Seis de cada diez constructores opinan que en las licitaciones para asignar una obra, los favoritismos, las componendas y los factores políticos pesan más que los aspectos estrictamente profesionales.
Para el 26.1 por ciento de los empresarios, la falta de inversión es el principal factor de obstáculo para el sector de la construcción, mientras que un 25.9 por ciento asegura que es la falta de liquidez por parte del contratante de la obra.