Autoridades energéticas del país dijeron este martes que todas las gasolinas que se usan en el Valle de México son de Ultra Bajo Azufre, por lo que descartaron que sea ésta la razón por la que ha empeorado la calidad del aire.
"En particular todas las importaciones para el Valle de México son de Ultra Bajo Azufre y se hacen de Texas donde la norma máxima es de 30 partes por millón (de azufre), lo mismo que aquí", dijo en conferencia de prensa José Antonio González, director general de Pemex.
El directivo reiteró además que México no importa gasolinas de China. "Esto tiene algo de sentido cuando China no exporta gasolinas".
En los primeros tres meses del año, el 90 por ciento de las gasolinas que se importaron provinieron de Estados Unidos, y el 10 por ciento de Europa, agregó.
Por su parte, el titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Rafael Pacchiano, aseveró también que las contingencias ambientales no han sido por las gasolinas, y tampoco en la determinación de la Corte, que permitió que los autos pudieran obtener el holograma '0' sin importar la antigüedad, siempre y cuando cumplieran con los niveles de emisiones.
El problema, dijo Pacchiano, han sido las malas prácticas en verificentros que han hecho que el 70 por ciento de los autos tengan el holograma '0', que permite circular todos los días.
La nueva norma para la calidad de las gasolinas, emitida en abril pasado, cumple con todos los estándares internacionales, agregó Guillermo García Alcocer, presidente de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Esta regulación pone como límite que las gasolinas tengan en promedio mensual hasta 30 partes por millón de azufre (ppm). Es decir, puede haber lotes que lleguen por ejemplo a 80 ppm, pero al final el promedio mensual siempre debe ser 30 ppm.
Para mejorar la situación ambiental el primero de julio habrá una nueva norma que buscará impedir que quien no merezca un holograma '0' o '00' lo tenga.
Esto incluirá una modificación al sistema de verificación pues ahora no se subirán a todos los autos a un dinamómetro, sino que se deberá utilizar el sistema de 'diagnóstico de a bordo', que monitorea algunas partes del sistema, el cual deben tener todos los vehículos en México desde 2006.
Además se usarán sensores remotos para verificar los niveles que arrojan los vehículos contra los que fueron registrados en los verificentros.