Economía

¿Grupo México se queda con los trenes en Argentina? Larrea prepara oferta para privatizar Belgrano Cargas

Los planes de Milei para la privatización de las vías de trenes en Argentina le vienen bien a Germán Larrea, quien está entre los ofertantes para hacerse de Belgrano Cargas.

alt default
Germán Larrea sería uno de los hombres en aprovechar la privatización de vías férreas en Argentina. (Fotoarte: El Financiero / Shutterstock)

Los inversores que buscan beneficiarse de la próxima ronda de reformas del mercado impulsadas por Javier Milei se están preparando para presentar ofertas en una licitación destinada a privatizar los atribulados ferrocarriles de mercancías de Argentina, como parte del esfuerzo del presidente por potenciar las exportaciones agrícolas y mineras.

La unidad de transporte del conglomerado minero y logístico Grupo México SAB, propiedad del multimillonario Germán Larrea, tiene previsto presentar una oferta por la red Belgrano Cargas tras reunirse con funcionarios del gobierno de Milei, según una persona con conocimiento directo del asunto. Se prevé una inversión de al menos 3 mil millones de dólares, según esta fuente, que pidió no ser identificada al tratar planes que aún no se han hecho públicos.

Grupo México Transportes podría enfrentarse a la competencia de las principales empresas comercializadoras de productos agrícolas, que trabajan para formar un consorcio con el fin de participar en la licitación, de acuerdo con la asociación de exportación y trituración de soja Ciara-Cec. El grupo podría incluir a Bunge Global SA, Louis Dreyfus Co. y Cargill Inc., además de la poderosa firma local Aceitera General Deheza SA.

Ni Grupo México, ni Bunge, ni Cargill ni AGD respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios. Louis Dreyfus declinó hacer comentarios.

La mayor parte del transporte de mercancías en Argentina —como el traslado de cosechas a los puertos o el envío de arena para fracturación hidráulica a yacimientos de petróleo de shale en la Patagonia— se realiza en camión, ya que los miles de kilómetros de vías férreas construidas por empresarios británicos hace más de un siglo quedaron en mal estado tras décadas de crisis económicas.

Pero Milei, cuyo experimento libertario acaba de recibir un nuevo respaldo electoral en las elecciones de mitad de mandato, busca avanzar con la privatización del ferrocarril de carga, así como de activos energéticos y servicios públicos. También planea reactivar una licitación para profundizar el río Paraná, una vía clave para las exportaciones argentinas hacia el Atlántico.


La modernización de la extensa red de Belgrano Cargas, que conecta el norte de Argentina con los puertos de Paraná, permitiría aumentar la producción de soja y maíz, además de facilitar proyectos de litio y cobre en los Andes.

Gobiernos anteriores también invirtieron en Belgrano Cargas, atrayendo financiamiento de China, que desde hace años apuesta por las infraestructuras sudamericanas. Sin embargo, la línea sigue siendo lenta y vulnerable. Algunos productores de litio incluso han optado por exportar a través de Chile en lugar de transportar por carretera hasta los puertos argentinos. Las redes San Martín —que cruza el país de este a oeste— y Urquiza —que conecta con Brasil— también podrían incluirse en el proceso de privatización.

Rio Tinto Group, que desarrolla enormes operaciones de litio también podría estar interesado. Una portavoz declinó hacer comentarios.

Larrea, quien controla la segunda mayor fortuna de América Latina, busca nuevas oportunidades de inversión tras una oferta fallida para comprar el negocio bancario mexicano de Citigroup Inc. El Grupo México ha considerado ampliar su capacidad de fundición en Estados Unidos y, en junio, retiró de la cotización a su unidad de transporte para tener mayor control sobre la toma de decisiones.

Los posibles licitadores aguardan conocer los términos y condiciones del proceso. Milei dio los primeros pasos hacia la privatización mediante su ley de reformas emblemáticas aprobada el año pasado y firmó un decreto ejecutivo en febrero para iniciar el procedimiento. Muchos líderes empresariales esperaban los resultados de las elecciones de mitad de mandato de octubre antes de comprometer inversiones.

Los inversores buscan garantías de que la inversión ferroviaria estará incluida en el programa de incentivos RIGI de Milei, que ofrece beneficios fiscales, aduaneros y cambiarios durante 30 años. Otro punto clave será la reorganización laboral del sector, ya que los ferrocarriles de carga emplean a miles de trabajadores estatales y la legislación argentina encarece significativamente los despidos.

También lee:

whastapp