El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Estados Unidos subió 2.4 por ciento interanual en mayo, una décima por encima del dato de abril, según informó este miércoles el Buró de Estadísticas Laborales (BLS), sin demostrar un gran impacto de la nueva política arancelaria del presidente Donald Trump.
La inflación subyacente, que excluye los volátiles precios de la energía y los alimentos, aumentó 2.8 por ciento, por debajo de lo esperado por los analistas, que había calculado un mayor impacto de los aranceles anunciados en abril por Trump.
En comparación con el mes previo, la inflación subió en solo el 0.1 por ciento tanto a nivel general como en el dato subyacente, ambas cifras por debajo de lo esperado, algo que permitiría a la Reserva Federal mantener la cautela sobre una posible bajada de los tipos de interés pese a las presiones de la Casa Blanca.
Trump pide a la Fed que rebaje las tasas tras “excelentes” datos de inflación
El presidente estadounidense Donald Trump volvió a pedir a la Reserva Federal (Fed) que rebaje las tasas de interés en un “punto completo” tras lo que considera unos “excelentes” índices de inflación, que subió solo una décima en mayo.
“Acaba de publicarse el IPC (Índice de Precios al Consumo). ¡Excelentes números! La Fed debería bajar un punto completo. Pagaríamos mucho menos intereses sobre la deuda que vence. ¡Muy importante!”, escribió en mayúsculas el mandatario en una publicación en su red Truth Social.
El reporte del Buró de Estadísticas Laborales (BLS), publicado hoy, registra que la inflación en Estados Unidos solo subió una décima en mayo con respecto al dato del mes anterior, tanto en el índice general como en el subyacente, que aumentó 2.8 por ciento con respecto al año pasado.
Ambas cifras están por debajo de lo estimado por analistas, que habían calculado un mayor impacto de los aranceles anunciados en abril por Trump, lo que permitiría a la Fed mantener la cautela sobre una posible bajada de los tipos de interés pese a las presiones de la Casa Blanca.