La petrolera estadounidense Valero logró restablecer su permiso para importar combustibles a México, luego de que el pasado 9 de abril el Servicio de Administración Tributaria (SAT) le aplicara una suspensión temporal, así lo afirmó en conferencia de prensa con inversionistas Gary Simmons, vicepresidente ejecutivo y director de operaciones de la empresa.
El directivo recordó que el SAT les informó que las aduanas mexicanas tenían dudas sobre el origen lícito del combustible que estaban importando al país, por lo que decidieron realizar una investigación a fondo.
“Desde que iniciamos nuestras operaciones en México hemos mantenido una política de plena cooperación con todas las autoridades locales e implementamos rigurosos controles de trazabilidad y seguridad en toda la cadena de suministro, así que fue decepcionante para nosotros que nos suspendieran el permiso sin previo aviso ni oportunidad de aclarar nada, y justo antes de las vacaciones de Semana Santa fue especialmente inoportuno”, apuntó.
Durante la presentación del reporte trimestral de Valero, el directivo agregó que en las últimas dos semanas tuvieron la oportunidad de contactar a las partes interesadas en México.
“La autoridad aduanera reconoció que Valero cumple plenamente con sus obligaciones tributarias y de declaración de importaciones y fuimos rápidamente exonerados de cualquier irregularidad”, aseveró Simmons.
El directivo reconoció que el paro de actividades generó una interrupción significativa en el suministro sus clientes; sin embargo, el combate a la importación de combustibles ilegales en el país es un esfuerzo que aplauden, ya que tendrá un impacto positivo en el negocio hacia el futuro.
Valero es actualmente el principal importador privado de combustibles del país. Tan solo el 9 de abril, día en el que recibieron la suspensión temporal por parte del SAT, las ventas de la empresa estadounidense representaron el 10 por ciento de la demanda nacional.
“Desde 2017, Valero ha habilitado inversiones de más de mil millones de dólares en infraestructura y proyectos de almacenamiento en México, en alianza con diversos socios de negocio”, explicó la empresa.
Actualmente, solo cinco empresas privadas cuentan con autorización para importar combustibles en México, entre las que se encuentran Exxonmobil, Koch, Shell, Tesoro y Valero, mientras que Pemex cuenta con un par de permisos.