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Esta es la historia de la Copa del Mundo falsa que Messi levantó en Qatar 2022

Luego de que el capitán albiceleste fuera levantado en brazos y presumiera la Copa del Mundo, Ángel Di Maria le dijo que no era la oficial.

Lionel Messi recorrió parte del estadio Lusail, en donde se coronó Campeón del Mundo en Qatar 2022 tras ganarle en penales a Francia, levantado en brazos con la anhelada Copa del Mundo, fotografía que se convirtió en una de las que más ha recibido likes en Instagram con más de 74 millones.

Sin embargo, no se trató de la original. Después de la premiación, el trofeo que provino de las manos de Infantino estuvo en la cancha pocos minutos, pues quedó resguardada para volver a su casa central en Suiza. Entonces los futbolistas de ‘la scaloneta’ obtuvieron una imitación oficial para seguir con sus festejos.

De repente, hubo dos trofeos y Ángel Di María fue el encargado de hacérselo saber a su capitán, pues él tenía la que estaba siendo resguardada por los elementos de seguridad de la organización. El momento lo capturó el fotógrafo Fernando de la Orden, de Clarín, quien mostró una instantánea en donde le muestra la parte de abajo mientras ambos ríen.

¿Cómo llegó la réplica de la Copa del Mundo a la cancha?

Los dueños son Paula Zuzulich y Manuel Zaro, que viven en La Plata, en Buenos Aires. Acudieron a todos los partidos en Qatar a alentar a la albiceleste. Para la final, escondieron en una bolsa la réplica que mandaron a hacer vía Internet, que se tardó seis meses en su elaboración.

“Tiene el peso de la original, está hecha con resina y cuarzo en el interior y bañada con una pintura símil oro”, dijeron al diario argentino.

Cuando terminaron los penales, la dieron a un familiar de Leandro Paredes para que el jugador se las firmara, de esa forma llegó desde la tribuna al campo de juego. Luego volvió nuevamente a sus manos, pero alguien volvió a pedírselas. Incluso Antonela Roccuzzo, esposa de Messi, también la tomó en sus manos.


Al final pudieron recuperarla firmada por Leandro Paredes, Lautaro Martínez, Guido Rodríguez, Nico González y Ángel Di María, no sin antes ser interrogados por los representantes de la FIFA al creer que era la réplica oficial.

“Creímos que no la recuperábamos más. Fueron como 45 minutos que la copa estuvo en manos de un jugador a otro, de un familiar a otro. Se sacaban fotos, fue todo muy lindo, pero queríamos que vuelva. Por suerte volvió en manos de Lautaro Martínez”, recordaron.

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