En los últimos tres meses, la zona del Ajusco fue escenario de la desaparición de dos mujeres y un hombre, situación que para familiares de personas desaparecidas se considera un “foco rojo”.
El caso de Ana Amelí, de 19 años, encendió las alarmas luego de que sus familiares la reportaron como desaparecida el 12 de julio, sin que hasta el momento se conozca su paradero.
A este caso se sumaron la incertidumbre de los familiares de María Isabella Orozco, de 16 años, quien fue vista por última vez el 2 de septiembre, y la desaparición de Luis Óscar Ayala, de 48 años, reportada el 16 de septiembre, cuyo vehículo fue localizado en la zona.
La madre de Luis Óscar Ayala declaró a Animal Político que revisaron el registro de geolocalización de su reloj inteligente y la última ubicación marcó Xalatlaco, Ajusco.
“El Ajusco es un foco rojo (...) Eso era una boca del lobo, porque estaba oscuro. No hay luz, no hay señal, no hay nada”, dijo al medio citado.
¿Cómo desaparecieron Luis Óscar Ayala y María Isabella Orozco?
La zona es un lugar que atrae a personas interesadas en realizar senderismo. En los casos de Ana Amelí y Luis Óscar Ayala, según testimonios, ingresaron para subir la montaña, mientras que en el de María Isabella Orozco no se confirma si descendió del transporte que la llevó hasta el punto donde desapareció.
El día de su desaparición, Orozco vestía pants negro, sudadera gris oscuro, tenis negros y portaba una mochila con estampado de flores.
Sus familiares informaron a las autoridades que conoció a una persona a través de un juego en línea, quien supuestamente es de nacionalidad argentina y fue identificado con el nombre de Brayan.
Por su parte, Luis Óscar Ayala vestía sudadera gris, gorra roja, tenis grises, chamarra roja y short gris.
Debido a la vegetación y a las características de la zona montañosa, las jornadas de búsqueda resultan complicadas. La falta de alumbrado obliga a realizarlas únicamente durante la mañana o la tarde, con la luz natural del día.
CDMX encabeza la lista de desapariciones
La Ciudad de México es la entidad con el mayor número de desaparecidos en el país, con mil 306 personas cuyo paradero se desconoce, de acuerdo con un reporte difundido por la organización México Evalúa el 21 de agosto.
El informe advierte que el volumen de desapariciones en la capital refleja un “deterioro en las capacidades de las fiscalías y un recrudecimiento del conflicto entre grupos criminales locales y nuevas organizaciones”.