Jazlyn Azuleth, la niña víctima de la explosión de una pipa en Iztapalapa que fue resguardada por su abuela, Alicia Matías, será trasladada al Hospital Shriners for Children en Galveston, Texas, donde continuará su tratamiento con ayuda de la Fundación Michou y Mau, que se encargará del traslado.
La fundación, dedicada a apoyar a pacientes pediátricos, es decir a niños, se sumó a las muestras de apoyo tras el accidente ocurrido en el puente de La Concordia, que al momento suma 14 personas fallecidas, así como otras 39 hospitalizadas.
A través de un comunicado, la fundación explicó que la nieta de Alicia Matías fue valorada con ayuda del personal del hospital Siglo XXI, con el objetivo de trasladarla a un centro donde recibirá ayuda especializada. Por ahora, no dijeron si la niña estaba fuera de peligro o qué clase de tratamiento recibiría.
“Agradecemos el Centro Médico Nacional Siglo XXI por su apoyo para que nuestro equipo médico lograra valorar el caso de la menor, así como al equipo médico que se encuentra en espera de la paciente para brindarle la atención especializada que requiere”, escribió la fundación Michou y Mau, en un documento firmado por Virgina Sendel e Iturbide, presidenta de la fundación.
Según la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, Jazlyn Azuleth tiene 2 años de edad, y permanece hospitalizada por quemaduras tras la explosión. Durante el accidente, la bebé fue sacada en brazos por su abuela, Alicia Matías, quien falleció el pasado viernes 12 de septiembre a causa de las graves quemaduras que padeció.
El Hospital Shriners for Children de Texas también se puso a disposición de apoyar, no solo a la bebé Jazlyn, sino a todos los niños que cumplan con los criterios para ser atendidos y fueron víctimas de la explosión de la pipa en Iztapalapa.
¿La niña Jazlyn Azuleth está en riesgo? Así son los traslados de pacientes con quemaduras
La fundación Michou y Mau ofrece traslados aeromédicos a pacientes menores de edad con quemaduras que así lo necesiten, como la nieta de la fallecida Alicia Matías en la explosión de Iztapalapa, y en el pasado explicaron que utilizan aeronaves que llegan a una zona donde puedan recibir a la paciente.
“Una vez llegando al hospital estamos listos para recibir a la paciente, escuchar a los médicos que estuvieron con ella, y comenzar nuestra preparación con el equipo de terapia intensiva”, comentó una trabajadora de la salud que participó en una operación para la fundación para una persona con quemaduras graves.
El protocolo incluye la aseguración de la vía aérea de la paciente, se corrobora que todas las líneas estén permeables, manejan la temperatura de la paciente, ajustan sedación y analgesia y se controlan aspectos para que no se complique el estado de salud de las personas que trasladan, en un proceso que toma de 40 minutos a una hora.
Una vez que se alista a la paciente, se informa al hospital receptor el estado de salud y esperan la luz verde para comenzar el trayecto, que consiste en trasladar el paciente del hospital a la ambulancia, de la ambulancia al aeropuerto y de ahí hasta la ciudad donde la esperan.
A continuación puedes ver un ejemplo de cómo operan quienes brindan estos servicios, en un vuelo similar, pero que la paciente era de Campeche: