La provincia de Mendoza, ubicada al pie de la imponente cordillera de los Andes, despliega su temporada invernal con una propuesta que combina lujo, aventura y paisajes incomparables. Ideal para los viajeros mexicanos que buscan experiencias memorables en familia, este destino argentino se posiciona como una joya invernal con servicios de primer nivel, actividades recreativas y alojamientos únicos.
Mendoza es reconocida a nivel mundial por su producción de vinos, pero su oferta va mucho más allá. Durante el invierno, se transforma en un escenario perfecto para disfrutar de la nieve con estilo, desde centros de esquí de renombre hasta pueblos de montaña que promueven el turismo sustentable.
Las Leñas: nieve, adrenalina y descanso de lujo
Uno de los principales atractivos es Las Leñas, el centro de esquí más importante de la región, ubicado a unas cuatro horas de la capital provincial. Este año, la temporada invernal arranca el 28 de junio con 10 kilómetros de nuevas pistas y un sistema renovado de nieve artificial.
El complejo no solo es un paraíso para esquiadores expertos, también cuenta con múltiples actividades para quienes buscan diversión en familia. Paseos en trineo, caminatas con raquetas, tubing en gomones gigantes y un parque de nieve para todas las edades forman parte de la oferta. Para los que prefieren contemplar el paisaje, la telesilla Marte ofrece una emocionante travesía hasta la cima del cerro, donde el restaurante Olimpo espera con platos calientes y vistas imponentes.
A la hora del descanso, Las Leñas también destaca. El Hotel Piscis ofrece alojamiento de lujo, un spa completo con sauna, masajes y tratamientos de belleza, además de un casino con mesas de juego, tragamonedas y un bar exclusivo.
Más allá de Las Leñas: Penitentes, Vallecitos y Uspallata
Otra opción es el complejo Los Penitentes, ubicado a 170 km de la ciudad de Mendoza. Famoso por sus formaciones de hielo que parecen figuras humanas en oración, ofrece 300 hectáreas de pistas para todos los niveles, escuela de esquí, centro de compras, restaurantes y hoteles. Desde allí, también se puede acceder a la Laguna de los Horcones y contemplar el majestuoso Cerro Aconcagua.
Vallecitos, por su parte, es una joya escondida a solo 95 km de la capital. Menos concurrido, con un ambiente más familiar y tranquilo, es ideal para principiantes que buscan aprender a esquiar en un entorno sereno, rodeado por la belleza natural de los Andes.
A solo 120 km, Uspallata se presenta como un pueblo de montaña con fuerte identidad rural y raíces incas. Seleccionado por ONU Turismo como uno de los candidatos al concurso “Best Tourism Villages”, Uspallata es perfecto para quienes buscan desconectar en un entorno auténtico, en contacto con la naturaleza y la cultura local.
Glamping premium: dormir con estrellas y nieve
Para quienes quieren una experiencia distinta de alojamiento, Mendoza también ofrece opciones de glamping en domos de lujo instalados en paisajes cordilleranos. Estas estructuras están totalmente equipadas para brindar confort en temperaturas bajas, combinando la aventura del contacto con la naturaleza con el glamour de un hotel boutique. Dormir en un domo bajo las estrellas, rodeado de montañas nevadas, es una vivencia exclusiva que conquista a viajeros de todas las edades.
Planificación y reservas
Todas estas actividades pueden explorarse y planificarse a través de Visit Argentina, la plataforma oficial de promoción turística del país, que ofrece información detallada para organizar una escapada invernal inolvidable.
Mendoza invita a descubrir su cara más sofisticada y natural, con propuestas pensadas para disfrutar en familia, vivir la aventura, relajarse y conectar con lo esencial: el placer de viajar.