Panasonic detendrá la fabricación de baterías de iones de litio en su fábrica de Pekín este mes, y recortará mil 300 empleos como parte de sus esfuerzos por centrarse en productos más rentables como baterías para automóviles eléctricos.
La planta de 15 años de antigüedad producía baterías para teléfonos móviles sencillos y cámaras digitales, ambas cada vez más superadas por la popularidad de los teléfonos avanzados.
"El mercado global para estos productos se ha estado contrayendo", dijo la portavoz de Panasonic, Yayoi Watanabe, añadiendo que el cierre se basaba más en las tendencias tecnológicas mundiales que en la crisis en los mercados chinos.
Los empleados fueron informados del cierre a finales de julio, dijo.
La finlandesa Nokia, que vendió su negocio de móviles a Microsoft en 2014, fue el principal cliente de la planta en sus primeros días, según el diario Nikkei.
El cierre de la planta responde a un intento de Panasonic de reestructurarse para centrarse en baterías de autos eléctricos y sistemas de ahorro en el hogar más que en productos electrónicos de consumo como televisores plasma o teléfonos inteligentes, donde afronta la dura competencia de competidores asiáticos.
En junio, la compañía dijo que invertiría en su negocio automovilístico unos 60 mil millones de yenes, unos 441.48 millones de euros, en el año fiscal hasta marzo, incluyendo la fabricación de baterías de iones de litio para Tesla Motors.