¿Despertaste un día y al momento de ir al baño encuentras sangre en el excusado? Esta situación es más común de lo que pensamos y aunque muchas veces se queda en un ‘susto’, los cambios en el color de la orina también pueden ser un indicador de un problema más severo.
Desde el rojo hasta el azul y el verde, los colores del arcoíris aparecen regularmente en los análisis de orina realizados en los laboratorios. Se trata de un factor del que no siempre estamos pendientes, a pesar de que es bastante revelador para nuestra salud.
La orina es producida por los riñones y “es el subproducto líquido de la descomposición de los desechos y el exceso de agua en el cuerpo.”, describe el Dr. Perry Leong, médico internista del Atlantic Health System.
Por lo general, el color normal de la orina varía de amarillo claro a amarillo pálido, dependiendo de qué tanta cantidad de agua tomes en el día. Incluso esta coloración se considera saludable por los médicos.
“El color de la orina depende de tu nivel de hidratación”, explica el Dr. Leong. “La mejor opción, por así decirlo, es lograr un color amarillo pálido, similar al del jugo de manzana diluido. Claro y transparente”.
Sin embargo, cuando otros tonos empiezan a surgir, o la orina se vuelve turbia y espumosa, entonces es una señal para acudir a consulta de inmediato.
Lo que el color de tu orina dice sobre tu salud
La Clínica Mayo explica que “los líquidos diluyen los pigmentos amarillos de la orina”, por lo tanto, cuanto más se bebe, más clara se ve. Y al beber menos, el color amarillo se intensifica.
Y aunque lo anterior definitivamente influye en el cambio de color, también pueden hacerlo muchos otros factores, entre ellos la alimentación, la ingesta de medicamentos o enfermedades graves o crónicas.
En este sentido, detalló cuáles son las razones por las que aparecen otras tonalidades en la orina.
- Transparente o amarillo pálido
Este es el color ideal de la orina. Significa que tienes un buen nivel de hidratación y que, por lo tanto estás bebiendo suficiente agua.
- Amarillo claro a amarillo oscuro
La orina de este tono es común y generalmente no es motivo de preocupación. Sin embargo, si la orina se torna más oscura con frecuencia, podría ser un signo de deshidratación.
- Amarillo ámbar o marrón oscuro
Una vez que la orina adquiere un color ámbar o marrón, esto podría significar una deshidratación severa, aunque también indicar la presencia de bilis que, a su vez es un síntoma de problemas en el hígado.
- Roja o rosa
La orina de color rojo o rosa claro puede indicar la presencia de sangre, frecuente en el caso de las infecciones de vías urinarias y cálculos renales, las cuales causan dolor. No obstante, el sangrado sin dolor puede ser un síntoma de un problema más grave como cáncer.
Si bien esta tonalidad puede causar preocupación, en ocasiones puede ser causada por comer alimentos como betabel, arándanos o moras. Medicamentos como la rifampicina (tuberculosis) y la fenazopiridina (infecciones en vías urinarias) también pueden provocar este cambio de color.
- Naranja
Si bien este color también puede deberse a una deshidratación, el consumo de ciertas vitaminas (como la A y la B12) o medicamentos suelen ser los “culpables”. Por ejemplo, la fenazopiridina y la sulfasalazina (utilizado para la hinchazón y la irritación), así como de algunos fármacos de quimioterapia para tratar el cáncer.
En algunos casos, la orina anaranjada también puede ser signo de problemas en el hígado o el conducto biliar.
- Azul o verde
La orina de estas tonalidades es la más rara de todas. Puede ser causada por ciertos medicamentos (amitriptilina, cimetidina, triamtereno, indometacina y propofol), colorantes comestibles o una extraña condición genética llamada hipercalcemia benigna. También puede ser un signo de infección bacteriana en el tracto urinario.
- Violeta o marrón
La orina de color marrón oscuro tiene una variedad de causantes. Las razones de esta coloración pueden ser tan severas como padecer porfiria (un grupo de enfermedades que afectan principalmente la piel o el sistema nervioso) o más inofensivas como la ingesta de habas o sábila.
Algunos trastornos hepáticos y renales, así como las infecciones urinarias también pueden oscurecer la orina. Lo mismo ocurre con las lesiones musculares por entrenamiento extremo, los cuales causan daño renal.
La toma de medicamentos también puede oscurecerla, como aquellos utilizados para tratar y prevenir la malaria, el estreñimiento, el colesterol alto y las convulsiones. Algunos antibióticos y relajantes musculares también pueden ocasionar este cambio en el color.
¿Cuándo debes preocuparte por el color de tu orina?
Si experimentas cambios en el color de tu orina y no puedes atribuirlos a medicamentos, suplementos o alimentos, entonces es recomendable acudir a un médico para encontrar la causa.
De acuerdo con especialistas del Hospital Ángeles, debes consultar a un especialista en caso de que:
- Tu orina pase de su color normal a ser consistentemente oscura, rosada, roja, naranja, azul o verde sin una causa aparente.
- Experimentas otros síntomas como dolor al orinar, dolor abdominal, fiebre o hinchazón.
- Notes espuma o burbujas en la orina de manera frecuente.
- Tengas cambios en la frecuencia de la micción o en la cantidad de orina producida.
