CIUDAD DE MÉXICO. Sin los dictámenes completos en la mesa y sin acuerdos en el controvertido tema de las coaliciones que impugnó el PAN, el Congreso de la Unión arrancó los trabajos del segundo periodo extraordinario de sesiones.
Aunque en el Orden del Día de la Cámara de Diputados se enlistó el dictamen que reforma al Estatuto de Gobierno del Distrito Federal en materia político-electoral, para dotar a la Asamblea Legislativa de facultades para que pueda armonizar su proceso electoral local con el federal, el documento aún no llega a San Lázaro, porque debe ser aprobado primero por el pleno en el Senado de la República.
Los temas a debatir en el pleno son:
La derogación de la fracción XXXI del artículo 209 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, respecto al haber de retiro de Magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF); diversas reformas a disposiciones de la Ley General en Materia de Delitos Electorales, para adecuar términos entre la nueva ley; y la polémica contrarreforma l artículo 87 de la Ley General de Partidos Políticos, para establecer que, en las coaliciones, el cómputo distrital de la votación de diputados y senadores se distribuya también para representación proporcional.
Sobre este tema, los legisladores anticiparon que aún se encuentra negociación entre los coordinadores parlamentarios, por lo que, de no alcanzar un acuerdo, podrían decretar un receso indefinido.