El pleno del Senado de la República aprobó en lo general y por mayoría el segundo dictamen de las leyes secundarias en materia energética, que comprende la Ley de la Industria Eléctrica, la Ley de Aguas Nacionales y la Ley de Energía Geotérmica.
El dictamen aprobado en lo general mantiene la figura de expropiación de tierras para actividades de la industria eléctrica.
Luego de ocho horas de debate y 55 oradores en tribuna, la alianza legislativa PRI-PAN-PVEM-Panal volvió a echar mano de su mayoría senatorial y avaló los ordenamientos con 92 votos a favor contra 27 sufragios en contra del bloque parlamentario PRD-PT.
Entre las disposiciones más importantes se encuentran que el Ejecutivo federal podrá determinar, mediante acuerdo, un mecanismo de fijación de tarifas distinto al de las tarifas finales para determinados grupos de usuarios del suministro básico, en cuyo caso el cobro final hará transparente la tarifa final que hubiere establecido la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
El Ejecutivo también deberá diseñar una estrategia para sustituir los subsidios generalizados por apoyos focalizados.
En más cambios se dará la creación del Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) y que el suministro eléctrico sea un servicio de interés público y que la generación y comercialización de energía eléctrica sean servicios que se presten en un régimen de libre competencia.
También contempla que la CRE aplique las metodologías para determinar el cálculo y ajuste de las tarifas reguladas, las tarifas máximas de los suministradores de último recurso y las tarifas finales del suministro básico.
Antes de la votación en el tablero electrónico del Salón de Pleno del recinto legislativo de Paseo de la Reforma e Insurgentes, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara alta, Raúl Cervantes Andrade, enlistó las reservas que se discutirán en las próximas horas para su discusión y votación en lo general.
El presidente de la Comisión de Energía y la secretaria de la Comisión de Estudios Legislativos Primera, el priista David Penchyna Grub y la panista Sonia Mendoza Díaz, respectivamente, fundamentaron el paquete de dictámenes al inicio de la sesión extraordinaria de este sábado.
En tribuna, el congresista del tricolor aseguró que el nuevo modelo para la industria nacional "garantizará a las y los mexicanos una mayor competencia en el sector para ofrecer mejores servicios a mejores precios".
Destacó que en este proyecto de ley se diseñó en comisiones un "mercado eléctrico mayorista", en el que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) llevará a cabo las subastas para la celebración de contratos de cobertura eléctrica.
En su oportunidad, la senadora panista aseguró que con estas leyes se garantiza el abasto de energía eléctrica a las próximas generaciones, ya que "plantea una expansión de la red de transmisión a una tasa de .1 por ciento anual promedio al 2026".
Luego, los senadores del PRD Dolores Padierna Luna, Rabindranath Salazar Solorio, Isidro Pedraza Chávez, Luis Sánchez Jiménez y Zoé Robledo Aburto subieron a tribuna para emitir su voto en lo particular en contra de los proyectos de dictamen.
La senadora Dolores Padierna enfatizó que el la Ley de la Industria Eléctrica plantea la desaparición de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el despojo del agua y de las tierras de los campesinos.
"Se desmantela una empresa valiosa como la CFE y se elimina la capacidad del Estado de agregar volumen y aprovechar las economías de escala para abaratar tarifas, dejando a la industria eléctrica a los vaivenes del mercado", sostuvo.
Inmediatamente después se abrió la fase para el posicionamiento de los cinco grupos parlamentarios representados en el Senado, en donde participaron Héctor Yunes Landa, por el PRI; Francisco García Cabeza de Vaca, por el PAN; Fernando Mayans Canabal, por el PRD; Gerardo Flores, por el PVEM, y David Moreal Ávila, por el PT.