GUADALAJARA. Sin desfile por el Día del Trabajo, pero con un desayuno oficial que congregó a los principales líderes sindicales en el día del trabajo, el gobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, aseguró que el presidente Enrique Peña Nieto "está apostándole a mejorar el salario mínimo" y no descartó que pronto se vean resultados "en los bolsillos de las familias".
Las reformas "para acabar con los monopolios, para utilizar los recursos naturales en beneficio de la gente, para que muy pronto nos cueste menos la luz, el gas y la gasolina; para que pronto encontremos un fertilizante más económico en el campo, tengamos más inversiones y se generen más empleos mejor pagados", enfrenta resistencia de grupos "que temen perder su comodidad y confort", dijo en su discurso frente a líderes sindicales de la entidad.
De los resultados en el ámbito laboral durante lo que va de su gestión, Sandoval destacó el combate a la corrupción en la Junta Local de Conciliación que permitió en el último año destituir a 60 servidores públicos quienes actuaban con base en sus intereses personales y se interpusieron 37 denuncias penales contra abogados y funcionarios.
A nombre de los dirigentes sindicales, el sempiterno líder de la CROC en Jalisco, Alfredo Barba Hernández, dijo que los principales enemigos de la clase trabajadora son: "La creciente falta de empleo, la carencia de prestaciones sociales y la economía informal".
Al margen del acto oficial, un contingente de trabajadores independientes se manifestó contra las reformas y lanzaron críticas a las "políticas asistencialistas del gobierno con las que insisten en comprar el voto", señalaron los diferentes oradores.