Contrapesos

¿En qué va bien México y en qué va muy mal?

Una sorpresa positiva es que la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos no ha reducido el apetito por invertir en nuestro país.

Datos relativos al entorno económico de México publicados esta semana, como inversión extranjera, comercio con Estados Unidos y crecimiento de la economía, ofrecen una fotografía del panorama nacional, que confirma grandes contrastes.

Una sorpresa positiva es que la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos no ha reducido el apetito por invertir en nuestro país.

La Secretaría de Economía informó que, con cifras preliminares, México registró una inversión extranjera directa (IED) de 40 mil 906 millones de dólares al cierre del tercer trimestre del año.

Esta entrada de IED representó un incremento de 14.5 por ciento respecto a enero-septiembre de 2024 e impuso un nuevo récord para ese periodo de nueve meses desde que se tiene registro, con cifras originalmente publicadas.

Según Economía, durante el lapso reportado el mayor crecimiento en la IED se observa en las nuevas inversiones, al triplicarse en comparación con el periodo enero-septiembre de 2024.

Las nuevas inversiones ascendieron a 6 mil 563 millones de dólares y representaron 16 por ciento de la IED captada.

Sin embargo, el flujo acumulado de inversión extranjera se sustentó en la reinversión de utilidades, que aun cuando cayó 9.7 por ciento anual y sumó 27 mil 749 millones de dólares, abarcó el 67.8 por ciento de la IED.

Esto quiere decir que dos de cada tres dólares de los flujos de entrada corresponden a reinversión de utilidades de los accionistas extranjeros que permanecen en el país y no se envían al exterior.

Otra sorpresa positiva es que México no sólo se confirmó como la mayor plataforma de exportación al mercado estadounidense, sino que también se convirtió en el primer comprador de la Unión Americana.

Estados Unidos volvió a publicar sus indicadores de comercio exterior tras 42 días de interrupción provocada por el cierre del gobierno federal más prolongado de su historia.

La información de la Oficina del Censo, perteneciente al Departamento de Comercio, mostró que México superó por primera vez a Canadá como destino principal de las exportaciones estadounidenses.

Entre enero y agosto de este año, Estados Unidos vendió a México 226 mil 411 millones de dólares, cifra que superó ligeramente los 225 mil 642 millones enviados a Canadá, su tradicional mercado prioritario.

Sobre la base de su integración en las cadenas globales de valor y su mejor postura relativa frente a Canadá y otros países en términos arancelarios, México está aprovechando su posición en el comercio con Estados Unidos.

Donde no hay buenas noticias es en materia de crecimiento económico, como ha sido la característica de 2025.

La economía mexicana apunta a un estancamiento, en un contexto de elevada incertidumbre, derivada tanto de factores internos como externos.

En el periodo julio-septiembre, el Producto Interno Bruto (PIB) de México se contrajo a una tasa trimestral de 0.3 por ciento, luego de un avance de 0.4 por ciento en el trimestre anterior, dato que, a su vez, fue revisado a la baja desde 0.6 por ciento para mostrar que la economía creció menos de lo que se estimaba previamente.

El PIB trimestral, publicado este viernes por el INEGI, salió en línea con la estimación oportuna dada a conocer el 30 de octubre.

Frente al periodo julio-septiembre de 2024, el PIB registró un decremento anual de 0.2 por ciento, ligeramente menor al retroceso de 0.3 por ciento que anticipó el dato preliminar.

Entre enero y septiembre de 2025, el PIB sólo creció 0.4 por ciento respecto a igual lapso del año anterior.

Además, la economía mexicana, medida por el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), se debilitó en septiembre.

El IGAE exhibió su mayor caída desde diciembre de 2024 al contraerse 0.6 por ciento tanto a tasa mensual como anual, revirtiendo el crecimiento de 0.4 por ciento en agosto previo.

No sólo eso, sino que la estimación oportuna para octubre, publicada el jueves pasado, sugiere un nulo crecimiento de la actividad económica en el décimo mes del año.

Estos indicadores arrojan señales de enfriamiento de la economía mexicana a finales del tercer trimestre del año y principios del cuarto, por lo que, probablemente, el crecimiento en todo 2025 será menor al de 0.5 por ciento que aún tienen como expectativa los analistas.

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