Contrapesos

¿Desafiará Banxico las presiones inflacionarias?

La inflación anual en México se aceleró más de lo esperado en el último mes y superó el límite superior del rango objetivo oficial.

La credibilidad del Banco de México (Banxico) frente a su compromiso con el mandato constitucional de mantener la estabilidad de precios está a prueba ante el hecho de que la inflación general ha aumentado en los últimos cuatro meses.

La inflación anual en México se aceleró más de lo esperado en el último mes y superó el límite superior del rango objetivo oficial, en medio de un ciclo de recortes a la tasa de referencia por parte del banco central y de una profunda desaceleración económica.

En mayo pasado, la inflación general fue de 4.4 por ciento anual –con el redondeo de cifras–, con lo que se observó una aceleración desde 3.9 por ciento anual en abril previo, según información del INEGI.

Además de superar el 4 por ciento por primera vez en el año, rebasó el límite superior del intervalo de variabilidad del Banxico en torno al objetivo de inflación de 3 por ciento más o menos un punto.

El componente subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general a mediano plazo, registró en mayo un incremento de 4.1 por ciento anual, su máximo de 11 meses, además de que aceleró desde 3.9 por ciento en abril.

Al interior del índice subyacente, que excluye los rubros más volátiles, los precios de las mercancías crecieron 3.7 por ciento anual, su mayor ritmo desde abril de 2024.

La inflación tanto de las mercancías alimenticias como de las no alimenticias se incrementó en el último mes.

Por su parte, los precios de los servicios aumentaron 4.5 por ciento contra mayo de 2024, aunque continuaron cediendo terreno para prolongar la tendencia descendente que observan desde octubre.

Además de que la inflación subyacente no ha disminuido desde noviembre pasado, la moderación en los precios de los servicios no alcanza a compensar la aceleración en los de las mercancías.

El índice de precios no subyacente, que incluye los productos más volátiles y las tarifas autorizadas por el gobierno, aceleró en mayo a 5.3 por ciento anual desde 3.8 por ciento en abril.

Ello fue reflejo de que los precios de los productos agropecuarios crecieron a una tasa anual de 6.8 por ciento, en cuyo interior el rubro de pecuarios se disparó 10.9 por ciento.

Destacó por su incidencia sobre la inflación general el encarecimiento del pollo, que sólo en mayo aumentó 10.6 por ciento, en respuesta a los brotes de gripe aviar.

Los incrementos en los precios de los productos agropecuarios no fueron contrarrestados por menores alzas en los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, que subieron de 3.0 a 3.9 por ciento anual entre abril y mayo.

Luego de que los datos observados de la inflación en mayo se situaron por arriba de las expectativas del mercado, las previsiones de los analistas para el cierre del año se ubican ligeramente por debajo de 4 por ciento o incluso en 4 por ciento.

En la decisión de política monetaria de mayo, cuando Banxico redujo la tasa de referencia en medio punto para ubicarla en un nivel de 8.50 por ciento, los pronósticos de inflación se revisaron al alza en el corto plazo al reflejar niveles más elevados a los previstos anteriormente para la inflación subyacente.

El pronóstico del banco central para la inflación general en el cuarto trimestre de 2025 la sitúa en 3.3 por ciento y mantiene la previsión de que converja a la meta de 3 por ciento en el tercer trimestre de 2026.

Sobre el tema, en la minuta del anuncio sobre la decisión de política monetaria de mayo, se revela que un miembro de la Junta de Gobierno destacó que la divergencia de los pronósticos de inflación de Banxico respecto de las expectativas de los analistas es un reto pendiente.

Advirtió que “la persistencia de esta divergencia podría tener un efecto sobre la credibilidad del banco central”.

En la Junta de Gobierno se debe sopesar si es adecuado continuar con el proceso de ‘calibración’ de la postura monetaria, que redujo la tasa de referencia en medio punto en cada una de las reuniones de febrero, marzo y mayo, y seguir con el ciclo recortes de la misma magnitud.

En términos del desempeño de la inflación, el mercado no está viendo lo mismo que Banxico, que puede perder confianza y credibilidad sobre sus acciones para cumplir con su mandato prioritario de estabilidad de precios.

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