Aunque pareciera que estamos ya entrando al final de la temporada de lluvias, las noticias que día a día se acumulan nos presagian que varios “huracanes” económicos y políticos se vislumbran en el horizonte. En medio de los escándalos que una vez más evidencian la corrupción y las ligas de complicidad con el crimen organizado de los principales actores políticos del obradorato, el país recibe la noticia de la calificadora Moody’s de que la elevada deuda del gobierno federal puede llevar a un riesgo mayor al actual y podría cambiar el perfil crediticio, incluso a perder el grado de inversión. El informe de Moody’s señala que para los años 2027-2028 la deuda estaría cercana al 50% del PIB.
Prácticamente en las vísperas de la revisión del Tratado comercial con Estados Unidos de Norteamérica y Canadá, el contexto para las negociaciones son no solo diferentes a las de 1994 sino incluso a 2017 donde ya con Trump en su primer presidencia las cosas fueron con tensión; pero ahora en medio de una política arancelaria como arma trumpista para golpear la globalización y acentuar su estrategia de proteccionismo, pero sobre todo con una economía mexicana estancada que en siete años no ha logrado llegar ni siquiera a un uno por ciento de crecimiento en promedio es claro que mantener al gasto de las obras de López obrador y la política social de las pensiones y ayudas a la población como estrategia política-electoral de Morena, lleva a una situación aún más crítica de las finanzas públicas, de ahí la importancia del informe de Moody’s y sus advertencias.
Sin embargo tal parece que en el gobierno morenista no leen ni escuchan ningún razonamiento que no sea sus propias narrativas, en virtud de que el paquete económico presentado al Congreso no contiene ninguna estrategia de política económica, que no sea más endeudamiento y tratar de esconder aumentos de impuestos para de elevar la recaudación, pero digámoslo una vez más, mientras la economía no crezca no habrá mayor recaudación fiscal y por tanto la deuda seguirá aumentando para hacer aún más crítica la situación de las finanzas públicas.
Hay quienes piensan que el gobierno federal ha abierto una “caja de Pandora” con lo del tema del contrabando de gasolina y que una verdadera investigación judicial llevaría incluso a una “ poda” de dirigentes morenistas no tan afines a la presidencia, pero me parece que aunque estamos viendo apenas la punta del iceberg no se atreverían a escupir para arriba por lo que más parece que es una especie de llamada light al interior de Morena porque la presidenta nunca se atrevería a tocar a López Obrador y parece más bien que lo que buscan es que esos impuestos que se evadían en las aduanas por eso que llaman “ huachicol fiscal “ se paguen porque el gobierno necesita dinero para mantener a flote sus compromisos de gasto social. Además no olvidemos que muchas de las familias mexicanas que reciben remesas se han visto afectadas por su reducción debido a las redadas o amenazas que mantiene el gobierno de Trump con los migrantes y que muchos que no han sido deportados tampoco se presentan a trabajar afectando el envío de remesas a sus familias y con ello también afectando en general el consumo en la economía mexicana.
El golpe al poder judicial en particular y en lo general, la captura del Estado por Morena , y ahora la amenaza de acotar el derecho de Amparo, son pésimas señales para la imagen de México y para incentivar la inversión, amén de una imparable violencia e inseguridad en todo el país, con la economía estancada es claro que lo que viene, en lo que haya de quedar del Tratado de Libre Comercio con nuestros socios del norte nos pone como país en una situación muy delicada, porque también la lucha contra los cárteles por el gobierno de Trump y su guerra intestina los lleva a necesitar recursos para sus guerras por el control territorial, pero si hacemos caso de los informes oficiales en decomisos es claro entonces que esos recursos que obtenían tampoco están llegando a la economía nacional porque al final todo cuenta en los términos del consumo interno.
En términos prácticos la oposición partidista es prácticamente inexistente, por lo que se ve difícil que el paquete económico vaya a sufrir modificaciones, por lo tanto no esperemos un cambio en la política económica del obradorato, nada está garantizado en las negociaciones de la renovación del Tratado comercial o incluso si este existirá como le hemos conocido desde hace más de 30 años, Trump continuará con su política contra los cárteles que ya son consideradas organizaciones terroristas, la amenaza contra la inmigración seguirá como parte sustancial del discurso y las acciones del movimiento MAGA en Estados Unidos y con ello no solo la violacion de derechos humanos de nuestros paisanos, sino que las remesas continuarán a la baja, la violencia no disminuye, menos la inseguridad; y el descrédito de las fuerzas armadas corona la podredumbre que caracteriza a los gobiernos morenistas, los huracanes están ya soplando también en el régimen autocrático en sus entrañas y no sabemos de qué tamaño serán los golpes internos , nada bueno se ve en el horizonte más que un oscuro panorama.