Tras el atentado a la libertad, con la absurda ley de tauromaquia sin sangre del que somos víctimas los capitalinos y los aficionados a los toros de la República mexicana, el pasado mes de marzo de este que será sin duda un año negro para México, surgió en el estado de Aguascalientes el lema y movimiento Vive Libre.
En mi entrega del día 8 de abril, desmenucé las 7 pifias de la ley hecha por antitaurinos y prohibicionistas para fungir como reglamento taurino en la CDMX. 7 idioteces, 7 incongruencias, 7 absurdos. Redactada por una banda de personajes sin noción de la tauromaquia en su más estricto sentido de cultura, tradición y espectáculo. La miopía e hipocresía de estos políticos que se apuntaron una victoria en su lamentable currículo como legisladores cuando el país está bañado en sangre, inundado de inoperancia, ineficacia y resentimiento. Las carreteras, un asco en su pavimento y un terror en la seguridad. La CDMX parece que fue minada, hoyo tras hoyo, no importa la colonia ni alcaldía. Lo único que parece importarles a esta banda de pillos es su popularidad, sacar la historia en Instagram bailando o pareciendo sonrientes con la falsedad que oculta lo que realmente son. Reparten y malgastan nuestros impuestos sin pudor alguno.
Los hidrocálidos respondieron rápido y bien, la sociedad se movilizó y evitaron ser víctimas de un atentado a la libertad como el que padecemos los chilangos. El lema VIVE LIBRE no es solamente para defender nuestro derecho al acceso a la cultura taurina, sino va en estos tiempos al México que no queremos que desaparezca. La República que hace 201 años se instituyó y que hoy puede convertirse en una dictadura encabezada por el resentimiento, el complejo de inferioridad y la división social.
VIVE LIBRE va más allá de lo taurino; aplica a cualquier ámbito social, cultural, deportivo, de expresión, artístico, deportivo y cultural. Es obligación moral de los taurinos adoptar el lema y luchar por él. Es momento de dar más toros y darlos bien. Que los toreros estén más comprometidos que nunca, que los ganaderos defiendan sus ranchos y su ganado lidiando toros serios, que los periodistas difundamos con verdad esta cultura, que el público asista a las plazas manifestando que México es taurino.
Hace una semana se cumplieron 499 años del primer festejo taurino en la CDMX. Hoy, por culpa de 60 personajes oscuros, vivimos un atropello. ¿Dónde está hoy el impresentable de Sesma? ¿Ha elaborado un plan para las más de 170 mil hectáreas del campo bravo mexicano? ¿Le preocupa el destino de más de las 118 mil cabezas de ganado que viven en completa libertad manteniendo en perfecto equilibrio ecológico esas 170 mil hectáreas?
Desde luego que no, estará quizá este verano en Vail, disfrutando de su enorme glosa que proviene de nuestros impuestos o protegiendo a su hermano ante el escándalo familiar que trae encima. Él y sus más de 60 cómplices en la Cámara de Diputados de esta ciudad sonríen sin realmente entender el daño que han hecho, preocupados con sus redes sociales y desocupados de las redes humanas que conforman esta sociedad.
México siempre ha luchado en contra de las injusticias; el jueves pasado decenas de miles nos manifestamos en el centro de esta ciudad: galleros, taurinos y charros marchamos por nuestra libertad, por el respeto a nuestras tradiciones y a lo que somos como país. No queremos ser otra cosa, queremos que los políticos sí lo sean. Que sean honrados, capaces, respetuosos y trabajadores. No una banda de vivientes del erario y cómplices de corrupción.
Este jueves Bruno Aloi torea en Las Ventas de Madrid; mucha suerte para él. Su preparación y sacrificio han sido intensos; la recompensa está por llegar.
Al día siguiente en Monterrey, los aficionados norteños tienen la oportunidad de ejercer VIVE LIBRE y asistir a la corrida nocturna con tres hidrocálidos: Diego Sánchez, Luis David y Héctor Gutiérrez ante 6 de Los Encinos; cartelazo, llenen esa monumental y defiendan su libertad.