Los casos de fraudes cometidos por influencers son cada vez más frecuentes e inverosímiles. Suelen tener una alta credibilidad entre sus seguidores, especialmente en nichos específicos.
Arrebatarle el control al CRT, otorgándole autorizaciones a otros organismos, es un movimiento que ocasiona más problemas que soluciones.
Cada vez resultará más difícil diferenciar la realidad de la ficción. Las noticias falsas están adquiriendo una nueva dimensión.
Tal vez sea necesario reconocer como autor a los dueños del programa que participa en una creación o tal vez decidamos que sus obras serán parte del dominio público.
Si alguien tiene razones para pensar que hay un 'complot' en su contra es la industria de alimentos y bebidas preenvasados.