De repente, en plenas vacaciones y durante el fin de semana. Así renunció el director general de la empresa más relevante de supermercados.
Walmart de México lo comunicó en seco, sin uno de esos protocolos que, sinceros o no, aplican los grandes corporativos cuando cambian una posición de liderazgo. Nada de “permanecerá hasta septiembre”, “iniciamos un proceso de transición”. Nada de eso. Fue un abrupto anuncio de viernes:
“Ignacio Caride presentó su renuncia a sus cargos como Presidente Ejecutivo y Director General de Walmart de México y Centroamérica (Walmex) y como miembro del Consejo de Administración de Walmex, con efectos a partir de hoy”.
La forma revela posibles problemas internos. Los vacíos de información se llenan con especulaciones. “El mensaje es que sale corriendo”, me dijo un ex directivo de la compañía.
Fue apenas en abril del año pasado cuando el argentino Caride fue ascendido para suplir a Guilherme Loureiro, su ex jefe, quien tomó la dirección regional de Walmart para Canadá, Chile, México y América Central.
Este sábado y a propósito de la salida, no tuvo muchas palabras adicionales hacia su sucesor. Prácticamente se ciñó al comunicado oficial:
“Los cambios en liderazgo nunca son fáciles. Ayer compartí que Ignacio Caride ha tomado la decisión de dejar Walmex. Esta no es una despedida fácil. Ignacio ha sido un estimado colega y le agradezco la forma en que ha mejorado la experiencia de compra omnicanal para nuestros clientes y socios. ¡Le deseo lo mejor!”, publicó Loureiro en Linkedin.
“Omnicanal” es una palabra inventada para explicar la presencia de una comercializadora todo el tiempo, en todas partes, incluso en los smartphones.
Caride fue un gran fichaje de 2018 y llegó para cambiar la perspectiva del conglomerado en un ambiente en el que incluso la enorme Walmart de México luce rezagada frente a gigantes como Amazon y Mercado Libre, empresa en la que trabajó previamente como director en México.
Su primera posición en Walmex fue la de vicepresidente de Ecommerce, para México y Centroamérica, desde la cual fue ascendiendo con distintas estrategias hasta la posición más alta de la compañía, desde la cual todavía hace 15 días aludió la próxima llegada de “One Hallways” que él debería estar lanzando esta semana.
Se trata de un próximo cambio en la aplicación digital de Walmart, que significó una revolución en la administración de procesos operativos de esta empresa que recién pisó el acelerador en el uso de inteligencia artificial para acompañar decisiones de gerentes de tienda.
“Comenzaremos el lanzamiento en un par de semanas con un número reducido de clientes y, a partir de ahí, ampliaremos la escala”, dijo a analistas el 17 de julio.
“Este es un gran lanzamiento para nosotros”, agregó durante una llamada pública. Usualmente, un líder no abandona el lanzamiento de un proyecto grande. Medidas como ésta fueron los golpes de timón de Caride a poco más de un año de tomar la estafeta.
Pero quizás faltó paciencia de alguna parte, pues las buenas intenciones no fueron acompañadas de cifras deslumbrantes. Por el contrario, las diferencias con el corporativo global se acentuaron.
Mientras las acciones de Walmart Inc. se apreciaron 45 por ciento en un año, el valor de las de Walmex cayó 6 por ciento en el periodo.
Si bien los ingresos de esta compañía a cargo de Caride avanzaron 8 por ciento en 12 meses, los de Chedraui crecieron 9 por ciento y los de La Comer 12 por ciento.
Sus críticos se fijaron en cambios de liderazgo hechos por Caride que mermaron la presencia de directivos con conocimiento del país, en un mercado en el que la gente debe saber que el día de la Candelaria, en Monterrey debe haber tamales de carne y frijol; en la Ciudad de México, verdes y de rajas; y en Mérida, vaporcitos y brazos de reina.
Ignacio Caride es muy hábil en comercio electrónico y esa habilidad tiene un gran valor hoy en el mercado internacional. Si bien unos días su teléfono estará en “silencio”, es posible que este mismo verano lo encienda para divulgar cómo continúa su historia.
En Walmart de México lo sustituyó el director de Walmart de Chile, Cristian Barrientos Pozo, supervisado por el brasileño Loureiro, en esta empresa controlada por estadounidenses que esta vez hicieron un ajuste de malos modos.
La columna Parteaguas entra en reposo. Regresa el martes 12 de agosto.