Pese a que hay todo el interés y difusión de que la situación de Petróleos Mexicanos (Pemex) que lleva Víctor Rodríguez mejore, lo cierto es que las noticias siguen siendo poco alentadoras.
Pese a que se hacen campañas desde la mañanera de que se paga y pagará a los proveedores lo que se les debe, nada más sigue sin fluir el dinero, eso sí hay que ser justos, en muchas dependencias pasa lo mismo y los pagos no salen, tanto que los mismos empresarios de las diversas asociaciones, ya alzaron la voz y pidieron que les paguen a los pequeños proveedores porque es insostenible y están al borde del colapso financiero.
Por eso, la propuesta de contratos mixtos, aunque suena bien, en la realidad es una cosa muy distinta, porque aunque Pemex estima recibir más de 8 mil millones de dólares por la adjudicación de los contratos mixtos con privados, la cantidad de barriles diarios que aportará a la producción diaria será sólo de 65 mil barriles en cada jornada.
En otras palabras, esta nueva modalidad aportaría algo así como el 5 por ciento de la producción diaria de crudo, que al mes de mayo estaba en 1.3 millones de barriles, claramente esto no resolverá la situación actual de la petrolera.
Si bien, hay empresas apuntadas como Grupo Carso de Carlos Slim que está interesada en campos terrestres como Ixachi en Veracruz que produciría hasta 18 mil barriles diarios. Otro campo terrestre que pudiera ser atractivo es Bakte, en Tabasco que tiene un potencial de 33 mil barriles diarios.
Los otros nueve proyectos restantes juntos, entre los que se encuentran Och, Homol, Sini‑Caparroso, Agua Fría, aportarían el 30 por ciento de la meta.
Por lo que, no es de extrañar que el interés por parte de las empresas que fueron invitadas a participar en esta nueva modalidad sea muy bajo, prueba de ello que incluso algunos de los 11 proyectos podrían quedarse desiertos, a decir de quienes están cerca del tema.
Y esto, porque en primer lugar los campos no tienen un alto potencial de producción y en segundo porque los costos de extracción de crudo y gas castigan demasiado los márgenes de rentabilidad, que ya de por sí tiene un riesgo financiero importante.
Aún así no hay que perder de vista que algunas de las compañías buscan arriesgarse como Harbour Energy que lleva en México Gustavo Baquero, Sinopec de Xixian Wang, Cheiron de Shady Kabel y Diavaz de Sergio Aceves.
Los proyectos se ven bien, pero lo cierto es que la falta de liquidez y por ende el pago a proveedores que se viene arrastrando, junto con un bajo presupuesto para exploración y extracción, siguen siendo el obstáculo estructural y lo que también desalienta y aleja cualquier interés en participar con la que era considerada una de las empresas más importantes de México y del mundo. Pemex simplemente no puede salir del hoyo.
Agenda 2025-2030 de la banca
Entre todo el tema de las acusaciones sobre presunto lavado de dinero de tres instituciones financieras mexicanas que ha acaparado a la industria financiera, la presentación de planes para los próximos cinco años por parte de la Asociación de Bancos de México (ABM) que preside Emilio Romano, pasó desapercibida, pero vale la pena darle seguimiento.
Y es que, de manera conjunta con el llamado Plan México, los bancos tienen previsto trabajar en cuatro pilares estratégicos y tres transversales, para impulsar el crédito, la bancarización y a las empresas que con eso contribuyen al crecimiento de la economía mexicana.
Por lo pronto, la semana que entra ya tienen listas las primeras reuniones de trabajo con motivo del Plan México enfocadas en las Mipymes.
La Agenda Estratégica 2025-2030, estará enfocada en bancarización y digitalización, que incluirá impulso al crédito, educación financiera y empoderamiento y, algo que parece en lo que sí trabajarán de manera gremial y más coordinada que es la satisfacción del cliente.
Y es que en la bancarización y digitalización, tan solo un 76.5 por ciento de la población cuenta con un producto financiero formal, 63 por ciento con uno de captación y 37.3 por ciento con un crédito formal; desde luego el plan incluye más temas de los que estaremos platicando.
Medicinas a la espera
Las compras consolidadas de medicamentos que sí fueron un éxito en el pasado, cuando eran encabezadas por el IMSS que lleva Zoé Robledo y a quien mencionan un día sí y otro no que sale de la institución, nada más no logran estar a tiempo ahora que Birmex las tiene bajo su “coordinación”.
A eso, hay que sumar que las deudas gubernamentales siguen golpeando a la industria farmacéutica nacional e internacional, pese a las promesas de pago que hizo Eduardo Clark, subsecretario de salud y Alejandro Svarch, titular de IMSS Bienestar.
Al igual que Pemex, los atrasos siguen y la realidad es que únicamente se ha avanzado con los pagos del 2024, por cierto, con bastante lentitud y por presión directa de la oficina de la presidenta Claudia Sheinbaum, que ha escuchado de manera directa a la industria que no recibe los pagos.
Lo que resulta increíble es que, en reuniones privadas, el personal de Svarch se ha lavado las manos con los laboratorios al reconocer que no existen registros confiables de las deudas del 2023 e incluso 2022 cuando existía el INSABI y que ya sabemos en qué acabó.
Este desorden para los empresarios del ramo es la falta de capacidad de reacción del equipo de Clark para reinstalar el proceso de compra consolidada que quedó anulado por la Secretaría de Anticorrupción de Raquel Buenrostro, quien, al igual que hace seis años, todos tienen claro que los señalan de manera injusta, pero lo que pierden de vista los funcionarios es que esa problemática y falta de visión afecta a los pacientes que siguen viviendo los efectos del desabasto y para quienes las medicinas en muchos casos son de vida o muerte.
La suerte de ABB en SLP
Pese a las críticas por mal gobierno que tiene Ricardo Gallardo de San Luis Potosí, que incluso le ha significado ser mal visto por el Gobierno Federal, la buena ubicación geográfica del estado, ayuda a que las inversiones lleguen.
Por eso, la expansión de empresas importantes sigue como el de la multinacional tecnológica ABB que inauguró la expansión de su planta ubicada en el Parque WTC Logístico ubicado en la zona industrial de San Luis Potosí.
Para ello, la empresa sueco-suiza que en México dirige Vicente Magaña, invirtió 12.1 millones de dólares, con lo que suma 10 mil metros cuadrados a sus instalaciones, genera 223 nuevos empleos e incrementa 50 por ciento su capacidad operativa.
ABB ya genera más de mil 600 empleos en el estado gobernado por Gallardo, y su planta en San Luis Potosí es reconocida a nivel nacional por generar el 70 por ciento de su energía en su propio parque solar, sin duda buenas noticias por donde se vea.
Por lo pronto, la moneda está en el aire.